Un lugar turístico, muy buena la comida en realidad, la atención buena, personal joven. En la cena escogí la, pechuga de pollo grillada, muy muy buena, jugosa y bien cocida, acompañada de vegetales a la plancha y ensalada. La habitación buena, aunque durante el día las cortinas no tapan muy bien la claridad del son, ya que son cortinas de PVC, el cual es fino y no lo logra. Un lugar tranquilo, en el mismo centro, a unos 100 metros de la plaza principal, pero tranquilo. El desayuno no lo pude disfrutar aunque lo pagué, ya que el mismo comienza a las 8 30 am hasta las 10 00 am, y yo debía continuar antes. Buen lugar para pasar la noche, o para estar en el centro ahorrando algo de dinero, ya que el precio, claro, es mucho menos de la mitad que en el Aphrodita o alguno de los hoteles de alrededor.…