Un hotel que a pesar de no estar del todo renovado, es genial!
Reservamos una habitación con vistas a la piscina, y finalmente nos dieron con vistas a la playa! Una playa de arena blanca finísima y con tumbonas preparadas bajo los arbolitos con forma de sombrilla y palmeras.
Las habitaciones son un poco oscuras y no cierran bien las ventanas y puerta de la terraza, por lo que se puede colar algún mosquito sin importancia. Son chalets de madera.
El wifi funciona correctamente. Las piscinas no estaban masificadas, y te dejan toallas sin depósito. El servicio de habitaciones es rápido y bueno, y aunque en general no es tan barato como en otros sitios de Malasia, son precios asumibles, pero más europeos.
Está a 5 minutos caminando de la zona de tiendas, bares y puestos en la calle.Más
- Wifi gratuito
- Aparcamiento gratuito
- Visitar sitio web del hotel