Me alojé por una semana en el Hotel El Diplomático durante mi primera visita (sola) a la Ciudad de México. La habitación era amplia y muy confortable, limpia y tenía todas las comodidades. El personal era muy simpático, aunque me dijeron en el teléfono que tenían habitaciones disponibles, cuando llegué del aeropuerto ya no tenían habitaciones disponibles. Tuve que buscar otro hotel por la noche, pero regresé el día siguiente y me dieron una habitación. Este no era un comienzo muy bueno, pero me alegro de haber regresado porque el lugar en donde está situado es excelente, el personal es agradable y servicial. Iba yo sola, por lo que fue un gran problema para mí. La única queja que tengo es el servicio de limpieza, que muchas veces eran las 4 por la tarde y mi habitación aun no estaba terminada, y ¡las camareras estaban en la habitación de al lado viendo televisión! Pero en general, el precio fue tan bajo que no me importó. Por las mañanas fuí al gimnasio gratis. Recomiendo este hotel.
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