El hotel es fantástico, pero sobre todo destacaría la atención al cliente. Todo el staff es muy amable, siempre sonrientes, y deseando ayudarte en cualquier cosa que necesites. Un ambiente muy agradable y profesional.
El buffet de la mañana es la única comida que hacíamos en el hotel, estaba muy bien. Todo de calidad.
Dormimos fenomenal, y todos los servicios estaban perfectos.
La ubicación era muy buena, a 11 kilómetros de la carretera principal pública que une Florencia con Siena. La carretera hasta allí estaba muy bien. Y el pueblo, tanto la parte de Certaldo Alto que es la histórica, como Certaldo Bajo que es la población actual, tiene varias opciones de bares, restaurantes y pizzerías. Es verdad que no es tan espectacular como San Gimignano u otro tipo de localidades más turísticas, pero se agradece poder estar en un sitio que no está invadido por turistas (o al menos no en la misma medida que otros centros turísticos) y que te puedas mover andando para tomar algo por la noche y relajarte. En la parte alta, varios locales durante nuestra estancia, tuvieron música indirecto. Muy agradable.
Todo a una distancia de un paseo.
Volvería sin dudarlo.