Museo interesante y muy lindo. Un poco extraño que todo la infirmación es solo en catalán (entonces, da la impresión que el público es limitado a catalanes?) y nunca ví tan abuso donde en una sala de arte se ponen fotos de activistas (de extrema izquierda por supuesto..) que no tienen nada a ver con arte baróca...

A mí me gustó mucho. Las cartelas y explicaciones están en catalán y aunque lo entiendo le señora de la entrada me facilitó un dossier en castellano que me facilitó mucho la visita. Consta de 2 partes en plantas diferenciadas, una dedicada a la Historia desde el Paleolítico con buena infografía y otra al arte sacro procedente del Museo Diocesano. Si es cierto que las obras que eran de Aragón casi todas han sido devueltas, sigue habiendo arte de calidad. El precio es ajustado, de acuerdo que hay museos gratuitos pero también los hay con menos contenido y más caros. Existe otro edificio enfrente con exposiciones temporales (gratis la entrada) pero no entré porque iba mal de tiempo. A poco que guste el arte lo recomiendo.