El trato fue malismo, con mucha prepotencia. La dueña sin conocerme de nada dijo que yo era muy joven para saber algo del mundo esotérico.Para que juzgas a una persona, sino la conoces de nada?.Pienso que esta persona, mejor se dedique a otra cosa, si no tiene psicología de atención al cliente. Me dieron ganas de salir al minuto uno. Tratándome con falta de respeto, diciéndome "peque". Y hablando siempre en primera persona, con mucho ego:El YO. Lo que hace es perder clientes y no ganarlos. NADA RECOMENDABLE.

Entre con mi pareja a mirar pulseras con algún símbolo celta, y la chica que nos atendió muy encantadora! Nos explicó que significaba cada símbolo, nos atendió muy amablemente y salimos cada uno con una pulsera preciosa! Estoy encantada!