no podes irte de Riva sin hacer la Ponale, llegar hasta Ledro. es un camino largo pero con las mejores vistas del lago. recomendable

Fuimos en familia con dos niños de 8 y 4 años a pie. En realidad tras leer reseñas en Tripadvisor decidimos llevar la silleta pero terminamos no usándola, recomendamos hacer este camino sin silleta o con las de ruedas todoterreno tipo Bugaboo Cameleon. Aún así, el de 4 años aguantó a pie dos horas de ida y otras tantas de vuelta sin ninguna queja, eso sí, con zapatos de monte. No hay grandes cuestas aunque el firme es irregular. Entre los túneles, las bicis que van y vienen, algunos trechos alternativos, las vistas al lago, ... van muy entretenidos. Hay que dejarles claro al principio que no se crucen al pasar bicis deprisa, pero una vez explicado la verdad es que se va relajado porque son las bicicletas las que van con cuidado de respetar a los peatones. Hay algún recoveco con sombra para pararse a descansar o tomar un tentempié. Vistas espectaculares. Muy interesante el componente histórico, hay alguna placa conmemorativa y búnker, para los adultos y los niños mayorcitos.