Casi al lado de la biblioteca del congreso, para los amantes de Shakespeare como para los que quieren ver espacios con alma. Tiene un teatro muy original y una sala de lectura hermosa. El personal fue muy amable. Más personalizado que otros grandes museos.

Es una biblioteca que guarda un gran tesoro: es uno de los sitios donde están gran parte o la mayor parte de las obras de Shakespeare; es bastante central, cerca de la zona del capitolio, es de decoración sobria, muy europea. Destaca el pequeño y bello teatro Shakespeare, al fondo de la biblioteca: es un pequeño teatro precioso totalmente de madera, que te transporta como a Escocia de los años 1700. Tuve la suerte además de ver representar acá el ensayo de una obra teatral, con sus luces sugestivas, sombrías, interesantes. La Biblioteca Shakespeare y su pequeño teatro son uno más de los atractivos de la gubernamental y agradable Washington!!!!