Visitamos el museo almorzamos en una de las habitaciones. La comida fue inventiva, un placer a la vista, única y muy sabrosa. Volvería a comer aquí de nuevo.

Para empezar, tengo que decir, que me fui en un viaje de la universidad, así que realmente no sé sobre los precios. Pero supongo que el museo en sí es gratuito, y se paga sólo por la comida de la orden. Tuvimos una comida increíble. Los museumis muy interesante, que consta de dos plantas con modelos muy precisos de alimentos, varios instrumentos necesarios para preparar y esculturas antiguas de los hogares chinos. Todos los comentarios están escritos en inglés. sín dudas vale la pena visitar.