Hicimos el trayecto en la cubierta, hacia buen tiempo aunque con el viento hubo que usar algo se abrigo. Ofrecen unos auriculares y una audioguía en inglés, salvo la explicaciones al llegar al pueblo, que son en varios idiomas. Cuando no hay explicación, hay música.
El viaje se hizo ameno y los paisajes son, espectaculares. Al ser verano, no todas las cascadas vertían agua.
El piso inferior tiene unos cómodos asientos y ventanales para ver el paisaje cómodamente, au que merece la pena pasar un poco de frío arriba.
Puntuales en salidas y llegadas.
El viaje hacia Ålesund fue más rápido, sin parar en la casacada.
Servicio de cafetería con bebidas y pancakes.