Fui con un amigo al poco tiempo de que abriese la terraza, tenían todas las mesas reservadas, y cogimos una silla y nos sentamos en la barra nos dijeron que no podíamos sentarnos en la barra. Pedí un whisky con agua,me pusieron la copa y la camarera me sirvió directamente la botella de agua y me retiró la botella con más de la mitad de agua, la pedí que no se llevara el agua y me dijo que si la quería tenía que volver a pagar como otro refresco, todo esto con mi botella de agua en la mano. Solo es un sitio de postureo que te tratan fatal.

Sin duda recomendar la puesta de sol desde este magnífico lugar. El gran ambiente (a veces algo masificado), la música y por supuesto el entorno idílico a la orilla del mar, hicieron del Hula Hula uno de los mejores sitios de mis vacaciones en Croacia con los amigos. Recomendable 100%