La excursión fue muy bien, el trato de la guía como de los trabajadores del barco genial. No pudimos avistar delfines, pero sí un pez luna. El picnic que nos entregaron muy bien, incluía dos bocadillos, agua, gazpacho y cerveza. La Isla de Lobos espectacular, paisaje virgen, playas paradisiacas. Por poner un pero, el bus nos recogía en el hotel a las 9:00, y antes de esa hora ya estaban llamando a ver dónde estábamos.