Danse danse Paris, danse danse! 🎶 Oldie but goodie, el histórico MR, cuánta cultura y cuánto arte sumergido en sus entrañas, con el que Toulouse Lautrec colaboró con sus impresionantes y bellos carteles publicitarios,
sigue valiendo la pena, es un clásico imperdible. Fuimos a París en familia con nuestros hijos de 18 y 21 años, sin cena, sólo champán y tuvimos la inmensa fortuna de que nos tocó en primerísima fila. Nuestros hijos salieron fascinados del show, incluso nuestra niña, que aprecia mucho la danza. Los vestuarios y cambios de escenario son impresionantes y de alta calidad. Hay shows de patinaje y equilibristas de fuerza y palancas asombrosos. Me gustó el show de la pecera gigante que sale del suelo, con coloridas serpientes y la valiente chica. Hay mucha variedad en el espectáculo y se mantiene constante el ritmo de los shows, por lo que las más de dos horas pasan sin sentir. El champán Chaudron casi sello de la casa, es correcto, suficiente en cantidad y sabor, sin ser exigentes, para pasar el show. Recomendamos muchísimo ir ya cenados, pues sin cena te dan mejores mesas. Noté que la gente cenando estaba más lejos. Cerca del MR hay infinidad de restaurants y justo junto, una excelente crêperie imperdible antes o después del show. La seguridad de los alrededores es muy buena. Nosotros optamos por el show de las 11 y comenzó casi a las 12, por lo que salimos pasadas de las dos am. La crêperie a esa alta hora estaba llena de clientes alegres haciendo fila (muy ágil). Para entrar al MR recomendamos llegar 40 min antes del show, ya que asignan mesa según se vaya llegando. La fila es larga y las revisiones del staff son estrictas y el trato pudiera llegar a ser algo rudo, aunque correcto. Dentro del recinto, la magia es increíble, se permite foto y videograbar antes del espectáculo pero realmente está prohibidísimo fotografiar el show. Una señora tuvo la ocurrencia de tomar video de la pecera y se le fue encima como fiera una de las amables meseras. No pasó nada, solo en 1 milisegundo le volteó de golpe el teléfono boca abajo en la mesa.
Toda la familia opina que ir al histórico MR ha sido la mejor parte de nuestro tour navideño en Paris a ver Féerie.