España está poblada de puentes que la gente calÍfica como «romanos». Ciertamente, unos pocos sí lo son (se dice que entre 11 y 13), pero, en su gran mayoría, son medievales o, inclusive más recientes. Otros han sido construidos sobre las ruinas de puentes romanos, pero hasta tal punto se han desnaturalizado las construcciones originales que resulta muy cuestionable calificarlos como romanos.
El puente «romano» ubicado sobre el río Genil, de ahí que su nombre «oficial» sea puente sobre el río Genil, fue construido en el siglo XII, aunque no se descarta que haya sido levantado sobre restos anteriores romanos o califales.
En 2007, fue declarado Bien de Interés Cultural, así que sea cual sea su identidad, en la que prevalecen las reformas y mejoras que se le hicieron en el siglo XVIII, vale la pena echarle un vistazo... y cruzarlo, ya que hoy en día es un puente peatonal.