Nunca imaginé que esta experiencia pudiese ser tan increíble. Me encantó volar sobre las nubes, sobre las copas de los árboles sin ventanas de por medio, bajar, subir, con una suavidad que alejaba cualquier tipo de miedo o vértigo que pudiese tener antes de empezar. Volamos por territorios de la Ribeira Sacra y, de verdad, fue una experiencia mejor que el mejor viaje. El piloto de aerotour se notaba que era un experto además de que, con su simpatía y pericia, consiguió hacernos sentir seguridad y tranquilidad. El resto del equipo también eran unos chicos encantadores que mejoraron, si cabe, la experiencia. Seguro que repetiré y lo recomiendo intensamente a tod@ el que esté pensando en hacerlo, y al que ni se lo haya planteado. Gracias!!