Hermoso templo antiguo, del siglo XIII, con un pórtico precioso y alto, y un altar estilo gótico que enmarca la imagen de uno de los patronos de Pamplona. Bella, llena de altares y capillas pequeñas, de imágenes antiguas, muy similar a tantas otras Iglesias en Europa, que siguen manteniendo ese aire misterioso, poca iluminación, pero que enriquece su historia.