La experiencia 'Un Día en Río' superó nuestras expectativas. Era imposible para nosotros realizar la logística y conocer todos los lugares destacados de la ciudad en un solo día de manera privada.
La visita al Cristo Redentor, una maravilla arquitectónica, a la que llegamos en tren, con impresionantes vista y con mucho verde.
El Parque Bondinho Pão de Açúcar, nos permitió disfrutar de vistas impresionantes de la ciudad y la imponente naturaleza que rodea a Brasil.
Las Escaleras Selarón, un lugar colorido y vibrante que refleja la energía y la creatividad de la ciudad.
Conocimos también el estadio Maracaná y la Catedral Metropolitana de San Sebastián.
Para recargar energías, comimos en una excelente churrascaría brasileña, donde la comida fue deliciosa, abundante y con un personal muy atento.
Nuestra guía, Geisa, ¡fue fantástica! Su calidez y conocimientos de la ciudad hicieron que el viaje fuera muy completo. Fue muy atenta todo el viaje.
Sin dudar elijan una opción cómo está para conocer Río de Janeiro.