Fuimos una noche, llegamos a almorzar, el lugar es muy bonito y se destaca lo bien cuidado, se nota la preocupación de los dueños. La comida de primera, la atención del personal muy cálida, sobresale su limpieza. Nos dimos un baño de tinajas en la noche con un rico Aperol. El desayuno es muy rico con huevos de campo, todo lo producen ahí. Muchas gracias a todos por hacernos tan agradable la estadía.
Tuve la oportunidad de hospedarme en este maravilloso hotel por 2 noches y la experiencia fue sublime. Desde la recepción, el ambiente, la cordialidad, la calidad del personal, la calidad del chef y la atención afectuosa y profesional de los propietarios. La habitación invita al descanso, con camas de primer nivel y sabanas de primerísima calidad. Las instalaciones, modernas, todas completamente funcionales, modernas y de alta factura. Se percibe que el diseño fue concebido con delicadeza y buscando sorprender al viajero. El living y las terrazas poseen una atmósfera de descanso y tranquilidad que lo relajan más allá de las expectativas. Una mezcla de ambiente de primer nivel con la simpleza y cordialidad de un equipo que ama lo que hace. La preocupación permanente del equipo, destaca y deja clara la intención de poner al cliente primero. Nunca una mala cara, siempre una atención especial. Carlos el chef, sencillo y virtuoso siempre dispuesto a servir y sorprender con platos especiales diseñados para paladares exigentes. He viajado mucho, he estado en muchísimos hoteles de importantes cadenas, sin embargo este me sorprendió y excedió todas mis expectativas. Estuve solo en mi estadía, sin embargo estoy planeando retornar en algunos días con todas mis hijas, sus maridos y mis nietos para celebrar en familia la vida, y en un lugar que invita como pocos a hacerlo. Felicitaciones y gracias por todo ese cariño.…
Tuvimos una excelente estadía, maravilloso fin de semana, rico clima, excelente comida. Fuimos en familia con dos niñitas de 4 y 5 años que gozaron hasta el último rincón de una linda casona ambientada a la zona logrando una magia que te extrapola de la rutina y el cansancio... gracias Camila y Lucia por ser tan buenas anfitrionas y Eduardo la mejor atención durante toda nuestra estadía..
Queríamos pasar un fin de semana de completo relajo y regaloneo en un ambiente campestre, natural, pero fino y exclusivo a un precio muy razonable. Este hotel boutique fue la mejor decisión. Sorprendentemente exquisito en el gusto, en la dedicación, en la amabilidad, en los detalles, en la exquisita decoración, en los espacios de relajo, En la combinación de una casa antigua de campo refaccionada con suelos de madera antigua, en los olores de sus flores, en los espacios de lectura, en sus ingredientes cosechados en su propia huerta, en la genuina alegría, amor por su trabajo y disposición a darte el gusto en todo. De 10.
llegue al almorzar el día viernes. Muy lindo lugar, excelente experiencia. Piezas muy bien adornas. Comida muy buena. Para que decir la atención de Eduardo, Marcia y de la anfitriona Camila... muy buena y amena. Las tinajas muy ricas. Un tremendo fin de semana para descansar.
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