Hotel antiguo con instalaciones básicas. Problema de temperatura en verano ya que no hay aire acondicionado y el ventilador es justito para no morir de calor. La habitación es funcional pero no vale los 70 € que cuesta ya que las prestaciones son muy sencillas y a veces rozando la deficiencia. Aún así el trato es correcto y la situación es muy buena.
La habitación es grande, y los armarios son suficientes. El baño correcto. En esto no tenemos ninguna queja. Pero las cortinas de nuestra habitació estaban rotas (adjunto foto) y solo 2 enchufes en toda la habitación.
Me parece una tomadura de pelo. Su fachada engaña a su interior. Un interior pésimo y antiguo, puertas viejas, habitaciones antiguas, camas de colchón de muelles inconodísimo, el baño mejor no hablemos de lo viejo y descuidado que está por no hablar del olor del interior según entramos y abrimos la puerta. En resumen, es un sitio que no recomiendo para nada ya que es un precio abusivo para las prestaciones que ofrece.
Nada más llegar, la atención del chico que nos atendió, dejo mucho que desear. Ni una pizca de cortesia, ni educación,ninguna explicación. En cuanto a las instalaciones, muy antiguas, de hecho, de 3 noches que pasamos, en ascensor se estropeó 2 veces. Y sinceramente, no quiero saber de que año era... El resto de los muebles, muy rudimentarios y antiguos.
El hotel es antiguo, pero todo es correcto. Quizá no tenga los lujos que debería tener por el precio que cuesta, aunque la zona es inmejorable. El servicio es muy correcto también. Si hace calor es un poco problemático el hecho que no hay aire acondicionado y sólo se dispone de un ventilador en la habitación para superar el calor.
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