Bienvenido a Hotel Villa Singala, tu segundo hogar en Port de Pollença. Hotel Villa Singala tiene como objetivo conseguir que tu visita sea lo más relajante y agradable posible, razón por la que tantos huéspedes siguen volviendo año tras año.
Se ofrece wifi gratuito a los huéspedes y las habitaciones de Hotel Villa Singala incluyen televisor de pantalla plana, frigorífico y aire acondicionado.
Durante la estancia, disfruta de algunos de los servicios que ofrecen, como terraza-solario. Los huéspedes de Hotel Villa Singala también disponen de piscina y bar con aperitivos allí mismo. Para viajeros con coche hay aparcamiento público gratuito cerca disponible.
Cuando estés en Port de Pollença, es posible que te apetezca probar cangrejo en algún restaurante cercano, como Restaurant Argos, Bodega Ferra o El Posito.
Si te interesa explorar Port de Pollença, visita algunas atracciones cercanas como Pine Walk (0,1 km) y Mirador de Sa Creueta (1,1 km), ya que puedes llegar a todas andando desde Hotel Villa Singala.
Hotel Villa Singala te acerca a lo mejor de Port de Pollença, tratando de que disfrutes de una estancia relajante y agradable.
La amabilidad del personal, la limpieza y el desayuno con productos frescos, de temporada y proximidad. Y lo más importante, hemos dormido en unas camas que nos han hecho descansar y eso es difícil si no es tu cama. En fin como en casa. Volveremos.
Modesto pero con detalles muy buenos, su salón para leer, sus desayunos completos, la variedad de fruta y bolleria no industrial se agradece. Hemos estado en hoteles de 4 estrellas con desayunos imposibles. Aquí el café rico y la atención también Muy buena limpieza de habitaciones y cerca del centro. Una buena opción para huir de las aglomeraciones
Se trata de un hotel excelentemente situado en port de Pollensa en la zona de los pinares pero no demasiado alejado del paseo marítimo. Limpio, cuidado al extremo, con un personal amabilísimo. Las habiltaciones no son grandes pero están cuidadas al detalle y han sido redecoradas recientemente por lo que no se corresponden con la decoración un tanto desfasada que recoge la página web del hotel. Nos dieron habltación superior a la reservada porque tenían disponibilidad, con una agradable terraza a una calle muy tranquila. Tiene piscina muy agradable. Los clientes en su mayoría extranjeros. El desayuno correcto, con un buffet superior a lo esperado en un hotel de tres estrellas.
Hemos pasado un fin de semana en este acogedor hotelito. Tranquilo, limpio, agradable, coqueto...cerca del paseo idílico de Pollença. Lo único "malo" era la poca variedad en el desayuno. El personal estupendo.
Si lo que se busca es tranquilidad y relax es perfecto. No hay ruidos y las zonas con bares y restaurantes se encuentran a unos 5-10 minutos del hotel. Tiene tres estrellas pero por el trato y los detalles de las habitaciones(pintura, mobiliario nuevo...) parece que tenga más. El staff es encantador y la localización como punto de partida para conocer la zona es perfecto. Los balcones que dan a la zona donde está el mar son muy agradables por la tranquilidad de la calle y la vegetación de la misma.
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