Decorado con un gusto exquisito, este hotel tiene todo lo que puedas necesitar durante tu estancia, es maravilloso alojarse aquí. El entorno está muy cuidado, toda la propiedad tiene muchas plantas y arboles, es un remanso de paz. El trato es muy personal y amigable, como hay pocos bungalows es un lugar tranquilo, (casi no ves a los otros huéspedes) y los dueños son muy amables. Todo en su hotel está dsipuesto con mucho estilo, cada rincón es un regalo para la vista. Además hay zonas con barbacoas, una pequeña piscina y jacuzzis, hamacas... Ellos mismos alquilan coches, ya que es recomendable para moverse libremente por la isla, y te prestan hasta una neverita de camping para que puedas tener agua fresca cuando salgas de excursión. También estan terminando una sala de relax donde se podran contratar tratamientos de bienestar, tipo masajes. Y aunque el hotel no tienen bar o cafetería (más tranquilo) a poco más de cinco minutos a pie encuentras un resort donde puedes desayunar o comer si no quieres usar tu propia cocina, incluso tomar una copa viendo la puesta de sol sobre el mar. Qué decir de los bungalows, el nuestro "Entre los árboles" era muy espacioso, tiene una pequeña cocina con todo lo necesario, el baño también muy amplio y con todas las facilidades. Es excelente también la zona privada exterior, con sillones, tu hamaca... Tienen todo pensado, se nota en cada detalle. Nosotros buceamos, como casi todo el mundo en la isla, y en el hotel hay espacios ideales para desalar y secar los equipos, al aire libre pero resguardados del sol, hay carretillas para transportar tu equipo hasta el coche, armarios grandes en los exteriores para guardar las maletas y bolsas de buceo fuera del bungalow... es fantástico lo bien montado que está. Tienen convenio con WannaDive, un centro de buceo a poco más de cinco minutos en coche del hotel (también muy recomendable), y allí además puedes utilizar las tumbonas de la zona de playa. Bamboo Bali es un lugar muy especial del que no querrás marcharte.…
En el mes de mayo del 2014 viajamos una semana con mi marido a Bonaire con la finalidad de practicar buceo de costa por primera vez, y el lugar recomendado por todos fue Bonaire, sin duda uno de los mejores destinos para este tipo de buceo. Sobre nuestra estadía en Bamboo Bali Resort no alcanzan las palabras para describirlo, en primer lugar quiero destacar la amabilidad y buena predisposición y la excelente atención de sus dueños siempre atentos hasta en los minimos detalles. En cuanto al bungalo que nos asignaron puedo decir que era supercomodo, con ventilador de techo, aire acondicionado, una confortable cama y un espacio destinado a la cocina perfectamente equipado con anafe, microondas, heladera con freezer, vajilla, todo lo necesario para aquellos que deseen cocinar durante su estadia. El bungalo tenia una galeria o estar externo, rodeado de vegetacion , con una hamaca paraguaya, sillones, mesa con asientos, era nuestro lugar preferido, todas las noches cenamos afuera en ese lugar, fue realmente encantador. Cerca de alli como parte de los lugares comunes teniamos una BBQ completa, en ella todos las noches mi marido preparaba la cena, generalmente pescado fresco que podiamos conseguir en Kralendijk. Una las cosas que mas adore fue el jacuzzi ( posee 2 grandes) que se encuentra en otra área común junto con una pequeña pileta,y solarium, fue un placer total poder relajarse en esos jacuzzis al atardecer, algo que realmente extraño, una paz total y absoluta. Merece una mención destacada la decoración de todo el lugar, por un lado algo rustica, y como su nombre lo indica al mejor estilo Balines o Thailandes, estabamos rodeados de budas. existen en el resort bungalos con mayor capacidad o con mas lujo,pero el nuestro que era estandar y con el uso de los espacios comunes fue ideal y a un precio razonable. El resort esta perfectamente ubicado y cercano a un supermercado bien provisto y con buenos precios. Este es un lugar totalmente recomendable. Espero poder volver pronto a Bonaire y no dudare en volver a alojarme en este lugar maravilloso y con sus dueños ( holandeses) que son unas personas muy amables con las cuales intentamos en todo momento tener charlas amenas, mas allá de las diferencias de idioma, siempre estuvieron predispuestos a la comunicación.…
Bonaire es el paraiso del buceo de costa, y Bamboo Bali es el paraiso para disfrutar de el. El lugar irradia paz, tranquilidad, te ayuda a conectarte con uno mismo. Estuvimos con Marisa, mi mujer, hace apenas dos semanas. Del lugar no ayudan las palabras, ya que no alcanzan. Nos hospedamos en la cabaña Java; un cartel sobre la puerta nos dió la bienvenida ni bien llegar: "Bon Bini Marisa y JP" (y sería un bello obsequio al final de nuestra estadía. Habitación ordenada, cocina completísima, baño cómodo, y una cama alucinante.Superluminoso con aire acondicionado y ventiladores. Dos estar privados, uno de ellos con una hamaca y otro donde cenábamos y desayunábamos a diario. BBQ completa donde cociné pescado todos los días. Varios lugares comunes, uno de ellos con pileta y dos jacizzis alucinantes con luces. El resto del complejo hermosisimo. Y que decir del equipo: Anno y Sebastian muy muy amables desde el primer minuto, atentos a cualquier duda o pedido (Anno nos trajo el pescado fresquísimo la primer vez; Sebastian dejó todo lo que estaba haciendo para cargar la batería de mi camioneta cuando me quedé sin energía). Charlamos todo lo que pudimos. Ojalá estén por Argentina alguna vez. En fin. Podría decir muchas cosas pero por otro lado quiero que quien los visite descubra por si mismo las sensaciones que logramos nosotros. Una alegría haberlos conocido. Lo mejor para ustedes !!…
Mi pareja y yo nos alojamos aquí por 3 noches y fue perfecto. Debbie fue muy amable y servicial. Hermosa sala y sala de estar. El desayuno con champán es imprescindible en el restaurante Chefs. Los jardines eran hermosos y es un complejo muy privado.
Soy un local y pagarlo por una noche de lujo fue una experiencia inolvidable, caminé en Bamboo Bali, la primera impresión fue simplemente "guau" tanto verde y con muchas flores que se sentía tan tranquilo y hermoso. Me quedé una noche. Las habitaciones están tan bien diseñadas, tan cálidas que no querrás irte. usted tiene su propio patio y el patio trasero es privado con un cálido jacuzzi. no me dejes empezar a hablar de que el baño se siente como tu propia mazmorra con una iluminación perfecta y hermosa. seguro que volveré a Bamboo Bali. Mucho amor y paz.
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