Mi esposa y yo hemos pasado el puente de Diciembre y todas las palabras son pocas para describir este hotel , cómo lo regentan sus dueños y el entorno donde se encuentra. Es un pecado ir a esta zona y no alojarte en este establecimiento, compartir vivencias con Marian y Miguel , y disfrutar de la cocina que ofrecen en la cena. Los desayunos te proporcionan toda la energía para descubrir el enclave y las habitaciones te reconfortan a la llegada. La decoración del hotel, con todo su estilo, no te deja indiferente. Muchas gracias por vuestra dedicación, amabilidad y consejos.
Este es el tercer verano consecutivo que tengo el placer de alojarme en La Casueña. Principalmente, hago senderismo. El entorno es perfecto para esto, con una naturaleza bellísima que llena el alma al perderse (intencionadamente) en ella. En cuanto al hotel: In-me-jo-ra-ble. Marian y Miguel hacen que te sientas mejor que en tu propia casa. El trato es excelente, muy amable, detallista, cálido, cercano y personal (Miguel y Marian recuerdan incluso las conversaciones mantenidas en años anteriores). El hotel está cuidado hasta el más mínimo detalle: las habitaciones, la sala de lectura, el comedor, las zonas comunes y la terraza. El ambiente es muy tranquilo, cosa que se transmite incluso en el comedor, donde las cenas son muy tranquilas, aunque haya varias mesas ocupadas. La cocina de Marian es espectacular. Los platos están riquísimos y la calidad es top, tanto en los desayunos cómo en las cenas. Tanto Miguel como Marian aconsejan sobre los lugares a visitar, rutas de senderismo, etc. Del 1 al 10... un 1.000.…
La limpieza , la simpatía de los propietarios, la calidad de la cena y del desayuno , las instalaciones hacen de este hotel uno de los mejores en los que he estado . El pueblo está súper cuidado y es muy bonito . El entorno es una pasada . Hotel totalmente recomendable
Ha sido un fin de semana fantástica, el hotel tiene mucho encanto, las habitaciones son amplias y están muy bien decoradas y limpias. Desayunos y cenas fantásticos gracias a Marian, y los dueños, Miguel y Marian, muy atentos y agradables. Volveremos!!
La atencion del hotel ha sido maravillosa personalizada con un trato encantador , el hotel estaba ubicado en un entorno con un paraje espectacular. Por otra parte la cocina ( aunque solo son cenas y desayunos) es estupenda y las habitaciones muy originales .lo recomendamos 100x 100
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