La búsqueda del hotel para familias ideal en Rothenburg no tiene por qué ser complicada. Bienvenido a TOP Hotel Goldenes Fass, una fantástica opción para viajeros como tú.
Los puntos de referencia que hay por los alrededores, como Rodertor (0,7 km) y Markusturm and Buttelhaus (0,7 km) hacen de Top Hotel Rothenburg Ob Der Tauber un magnífico sitio donde alojarse en Rothenburg.
Para que te sientas como en casa, las habitaciones en el hotel incluyen televisor de pantalla plana y frigorífico, y mantenerte conectado es fácil, ya que hay wifi gratuito disponible.
Los huéspedes tienen acceso a conserje, espacio para guardar el equipaje y prensa durante su estancia en Top Hotel Rothenburg Ob Der Tauber. Además, Top Hotel Rothenburg Ob Der Tauber ofrece desayuno, lo que hará tu viaje a Rothenburg incluso más gratificante. Y otra ventaja es que hay parking gratis disponible para los huéspedes.
Si buscas unos pubs, considera probar LANDWEHR-BRAU am Turm., que no se encuentra lejos de Rothenburg Ob Der Tauber Top Hotel.
Si te interesa explorar Rothenburg, visita jardines como Burggarten, Leyk Lotos-Garten y Klostergarten.
TOP Hotel Goldenes Fass está deseando darte la bienvenida cuando visites Rothenburg.
Nos recibió una señora muy amable que nos explicó todo lo referente al hotel, la ciudad y las visitas al centro histórico. La habitación de buen tamaño, con estacionamiento amplio y gratis (en todas partes nos cobraban entre 15 y 24 euros por noche). Cama cómoda, baño impecable, desayuno muy variado y con todo de muy buena calidad. Está a unos 8 minutos caminando de una de las entradas al caso histórico, lo que en realidad es casi nada; de hecho en un día fuimos y volvimos 2 veces sin ningún problema. El único pero es que no tiene ascensor y si te toca una habitación en el piso 2 (que en realidad es el tercer piso), el tema de subir las maletas no es menor. Lo menciono en el caso de personas que puedan tener problemas con esto; afortunadamente para mí no fue tema y aproveché de hacer ejercicio ;) Si visitara nuevamente Rothemburgo, volvería a este hotel.…
Hotel situado a las afueras del centro histórico y a unos 5 min en coche y 10 de bicicleta (las alquilan en el hotel) Es un hotel cómodo para el descanso. El silencio es una de sus mejores cualidades. La mujer que regenta el negocio es muy amable y te ayuda en todo. Las habitaciones si viajas con niños son muy amplias y limpias. El desayuno suficiente y generosos. La habitacion costó em agosto 118 euros, buen precio siendo temorada alta. El hotel cuenta además con parking privado gratuito.
El servicio que recibimos durante nuestra estadia en e Hotel Goldeness Fass en Noviembre de 2015 fue de buena calidad. El tamaño de la habitación para familias (5) muy bueno, comparado con otros hoteles en Alemania - que tienen poco espacio -. El baño de lujo. El desayuno fresco y suntuoso, con todo lo necesario para adultos y niños. A solo 8 minutos caminando de una de las puertas laterales de esta bellísima ciudad en Baviera (llamada la Ciudad de la Eterna Navidad). Nos ayudaron inclusive a lavar una pequeña cantidad de ropa de nuestra bebe que se le había ensuciado sin costo alguno. Volveria sin pensarlo. Excelente opción, justo al lado de la estación de trenes de Rothenburg lo que lo hace muy conveniente. Sin embargo, como todos los hoteles en Rothenburg es costoso (refiriéndome a los cuartos familiares) mas no es tan costoso como otros. El aspecto mejorable es que no tienen elevador.…
Este hotel a las puertas del casco antiguo es interesante a la hora de aparcar, para las personas que llegamos a este encantador pueblo en coche, puesto que tiene un gran aparcamiento, por lo general es un hotel normal sin lujos correcto, el bufé del desayuno está bien, las habitaciones amplias, en contra los baños son pequeños, las camas son cómodas y apenas hay ruido. El trato por parte del personal es correcto. Totalmente recomendable para los que no buscan lujos.
Pasamos navidad en este hotel. El hotel es pequeño, como una casa, lo cual hace que sea muy acogedor. Está todo muy ordenado y limpio, y nos recibieron muy amistosamente. Incluso, para el día de navidad nos dejaron galletas de regalo en la pieza, y también al irnos nos entregaron una galleta con forma de reno que decía "Frohe Weinachten". El desayuno era muy bueno y muy completo. La ubicación es excelente, ya que está muy cerca de la estación de trenes y a unos 10-15 minutos del centro a pie (dependiendo de la velocidad al caminar).
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