La búsqueda del hotel con encanto ideal en Rothenburg no tiene por qué ser difícil. Bienvenido a Altes Brauhaus, una fantástica opción para viajeros como tú.
Las habitaciones de los huéspedes ofrecen servicios como minibar, y los huéspedes pueden permanecer conectados con wifi gratuito que ofrece el hotel.
El establecimiento también cuenta con desayuno, para que la estancia sea más agradable.
Durante su estancia en Altes Brauhaus Hotel, los huéspedes pueden visitar Schmiedgasse (0,2 km) y Rodertor (0,2 km), que son algunas de las principales atracciones de Rothenburg.
Cuando te entre hambre, no dudes en dirigirte a LANDWEHR-BRAU am Turm., que es un pub conocido por residentes y viajeros.
Rothenburg también se conoce por sus lugares históricos, como Old Town, Town Walls y Gerlachschmiede, que no se encuentran muy lejos de Altes Brauhaus Hotel.
Altes Brauhaus te acerca lo mejor de Rothenburg, haciendo que tu estancia sea agradable y relajante.
La ciudad es de cuento de hadas, y este hotel va muy bien con ella. Es una enorme casona que alguna vez fue una cervecería, adaptada como hotel con muy buen gusto y mucha calidez. Tomamos una habitación cuádruple (no son fáciles de encontrar) y nos dieron una muy amplia y cómoda. Hay que tener ojo con la recepción, eso sí. Llegamos al hotel a las 8:30 pm y la persona que atendía nos dijo que estaba a punto de irse y dejarnos sin habitación, porque sólo se atendía hasta las 8 pm. Dijo que había tratado de cargar una noche en mi tarjeta de crédito para asegurar la reserva y el cargo le salía rechazado, lo cual es absurdo porque la tarjeta no tenía ningún problema, de hecho pagué con ella al día siguiente. Seguramente no estaba ingresando el número correcto. El caso es que nos hizo sentir que nos estaba haciendo un favor, al darnos la habitación. Un poco desagradable la situación, pero no quita ni pone a la comodidad del lugar.…
Hotel cumplidor, con posibilidad de terraza. La habitación es amplia y funcional. Sin lujos pero suficiente. Lo más destacable del hotel es el comedor. Invita a pasar la noche de Navidad cenando en familia.
Excelente relación precio-calidad. Las habitaciones son amplias y limpias. El hotel es una vieja cervecería remodelada, por lo que mantiene un estilo arquitectónico particular, muy bonito y bien decorado. El desayuno es muy bueno y no es caro. La atención es correcta. El unico punto en contra es que las habitaciones (al menos la que me tocó a mí) no tenía aire acondicionado.
Llegamos en la noche desde Berlín al hotel, no nos querían recibir porque ya había pasado la hora de recepción y que no era problema de ellos que llegáramos tarde. Querían cancelar la reserva e igualmente cobrar la noche, atención descortés por Parte de la recepción, finalmente a regañadientes nos dieron la habitación ...no es recomendable
Un hotel excelentemente bien ubicado con muy buen estacionamiento, fácil de llegar. La ubicación dentro del pueblo ideal, justo para comenzar a caminar y perderse por sus calles. El edificio muy simpático, bonito y que conserva rasgos propios de la arquitectura del pueblo. La habitación que nos dieron muy amplia, con un living cómodo y un baño remodelado y con artefactos modernos, muy bonito. Un comedor precioso y un desayuno bueno. Lo único que no era muy cómodo era la cama: el colchón y las almohadas no están muy a la altura del resto de la habitación pero finalmente es cosa de gusto.
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