desde el primer momento, nos sentimos como en casa todos muy atentos y serviciales. tanto en la terraza como en el restaurante siempre sonriendo, muy limpio y el pescado fresquísimo, volveré muy pronto.
Me resulta inverosímil leer las críticas favorable de este Hotel Hemos estado alojados durante el mes de Agosto y hemos verificado el declibe de la marca Westin. El lavado de cara del Hotel no sólo es insuficiente, sino que además acentúa más el deterioro real que sufren las instalaciones; colchones antiguos, mobiliario exterior oxidado, la limpieza depende de quien te toque ese día, Servicio de Habitaciones, a veces puede que te atiendan.... El desayuno es de los más básico y simplista, superado por cualquier 4 estrellas decente La piscina es un campo de colchonetas flotantes que pese a estar prohibidas, hacen imposible el baño o el descanso. Si quieres una hamaca en la piscina, tienes que levantarte a las 7 para ocupar una con una toalla al mas puro estilo Benidorm, esta práctica también esta prohibida, pero en este Hotel las normas no existen...... No intentes ir al Gimnasio si eres de lo que aún lleva la mascarilla en espacios cerrados, de hecho por dentro del Hotel serás de los pocos que la lleve puesta, a parte del personal. Es agónico ver cómo los empleados que en su mayoría son excepcionales, luchan por sacar adelante este barco con la mitad de tripulantes que probablemente serían necesarios, no tienen medios ni apoyo para hacer respetar las normas y poder cumplir las medidas que Westin publica en su web y que desde luego, creánme son "Falsas"…
Hotel estupendo, para el relax y la desconexión. El personal muy atento y amable. La comida exquisita y los desayunos muy buenos. Hemos ido en época de Covid19 y todo muy limpio y cuidando en todo momento el servicio de comidas. Comimos allí durante la estancia. El Spa maravilloso, en el cual no entran niños, así que así los papas encuentran su momento de relax, mientras los niños disfrutan en la piscina. Buena estancia.
Muy bonito Resort de lujo con un fantástico SPA. El personal, tanto en el restaurante ( Nerea) como en el SPA( Vicente) muy amamables con excelente servicio. El check-in y check-out también muy agradable. Muchas gracias, volveremos!
Maravillosas vistas. Elegancia sin ostentaciones. El restaurante ofrece un menú para deleitar al más exigente paladar. Atendieron nuestros deseos de tener un discreto arreglo floral en nuestra mesa. Atención impecable. Rodeado de naturaleza y verdor.
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