La búsqueda del hotel para familias ideal en Torremolinos no tiene por qué ser difícil. Bienvenido a Hotel Cabello, una fantástica opción para viajeros como tú.
Cabello Hotel es un hotel para familias con televisor de pantalla plana y aire acondicionado en las habitaciones, y es fácil permanecer conectado durante la estancia, ya que ofrece internet gratuito para los huéspedes.
Además, los huéspedes pueden disfrutar de bar, lo que lo ha convertido en una opción popular entre los viajeros que visitan Torremolinos.
Para aquellos interesados en visitar puntos de referencia conocidos durante su viaje a Torremolinos, Cabello Hotel se encuentra cerca de Mujeres Corriendo por la Playa (1,0 km) y Plaza De La Nogalera (1,0 km).
Los viajeros que quieran costillas pueden acudir a Meatina Steakhouse, Spanish Garden o Hula's Tiki Lounge. Si no, puedes dirigirte a un restaurante de comida francesa como El Bodegón.
Si tienes tiempo, La Carihuela, Parque La Batería y Calle San Miguel son atracciones conocidas a las que puedes llegar andando.
Hotel Cabello te acerca lo mejor de Torremolinos, haciendo que tu estancia sea agradable y relajante.
Muy buena ubicación pero lamentablemente dejo bastante que desear. No funcionaba la luz del baño, avisamos en la recepcion y nos dijeron q no la podian cambiar. Es complicado estacionar en la zona. Esta muy cerca de la playa.
Pasaba una semana en este hotel hace poco. Tenia que cambiar de habitacion por un fallo de una maquina de aire acondicionado, pero me hizo el cambio rapidamente y estuve muy contenta en una habitacion con preciosas vistas al mar. Toda la personal muy atenta y simpatica. Un sin fin de bares y restaurantes para comer alrededor, y una terraza que pertinece al hotel muy bueno en la plaza donde se puede desayunar or tomar una copa por la tarde/noche.
El Hostal está a 30 segundos de la playa, pegado al paseo marítimo. Personal amable, abierto 24 horas , con aire acondicionado en la habitación y eso sí vistas al mar, pero nada más para los precios que tienen. Sin ascensor. A partir de las 8 a.m. mucho ruido de portazos de limpiadora y residentes, toda la mañana, si te acuestas tarde, como nosotros que fuimos a una feria una de las noches, por la mañana no podrás dormir mucho, entre el ruido de fuera y la luz que entra por la ventana de la habitación, que no tiene persiana, si no que tiene un store que NO tapa la claridad en toda la habitación. La televisión aunque plana muy pequeña. Al menos el cristal de la ventana si es de aislamiento y no se oye ruido externo, porque es calle de mucho paso en agosto, bares y restaurantes pegados a él. Y si hablamos del baño...sin bidé, por supuesto. La cisternas de tiempos de mi abuelo de esas que cuelga la cadena del techo y tiras del extremo en forma de triángulo metálico, la tapa del váter de plástico que se movía al sentarte, parecía que te ibas a caer cada vez que te sentabas. Bañera pequeña y con el tubo de plástico de salida del aire acondicionado a lo largo de la pared exterior (por fuera) de la bañera desembocando en ella, más cutre imposible. Ah!!, la alcachofa de la bañera de plástico, también de la misma época que la cisterna, y el chorro del agua de la ducha, que salía de la alcachofa...un hilo de agua para ducharte...minúsculo, no veas lo que se tarda si te tienes que lavar el pelo... Un desastre!!…
Nos lo recomendaron unos amigos y fue todo un acierto. Hotel familiar y en un entorno inigualable en plena Costa del Sol. Habitaciones sin grandes lujos pero con unos servicios impecables. Posee una cafetería donde tomar un exquisito desayuno o bien tomarse una copita. Estuvimos alojados 5 noches en la habitación 112 y pasamos unos días fabulosos, nada más que dar las gracias a todo el personal por hacernos pasar unas vacaciones inolvidables.
Fuimos a pasar 4 noches a Torremolinos. Ya lo conocíamos de otras dos veces, así que decidimos ir directas a algún hotel de La Carihuela. Es un hotel sencillo pero muy limpio. Se ve que es antiguo, pero lo tienen impecable. Además pasan a limpiar y cambiar las toallas a diario. También tienen aire acondicionado y televisión. Nos tocó con vistas al mar, lo cual se agradece porque a pesar del calor del día y de este sofocante julio, la habitación siempre estaba fresquita y entraba brisa. Y por cierto... es cruzar la plaza, y ya tienes el paseo marítimo y la playa. Puedes ir paseando a Benalmádena o al centro de Torremolinos, que está a 10 minutos andando. El personal es muy amable y te puede aconsejar sobre lugares para comer en la zona. El desayuno era continental. El pan que te ponían estaba riquísimo tostado (lo probé tanto con tomate como con mantequilla) y el café de máquina que tienen también sale riquísimo, con espumita. Tuvieron un bonito detalle conmigo, y es que como soy intolerante a la lactosa, compraron un cartón de leche sin lactosa para que pudiera tomar durante mi estancia. Puede que por la noche haya un poco de ruido, pero ¡es normal! Está al lado de una zona de tránsito, de algún bar de tapeo, y de un chiringuito que pone música hasta las 2.00 de la mañana. Pero es normal, ¡estamos de vacaciones! Aun así, si cierras la ventana que da al balcón se aísla muy bien el sonido. En resumen: relación calidad / precio inigualable. Si volvemos a Torremolinos, repetiremos aquí.…
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