El hotel está muy bien decorado, muy limpio y muy cómodo. Estuvimos en febrero, para celebrar el día de los enamorados. Ese día nos dejaron unos bombones. Ademas a la llegada teníamos bebidas disponibles gratis en el minibar. La playa está a 2 minutos andando. Hay muchos restaurantes cerca. La chica de la recepción superamable. Sin duda queremos repetir.
Hotel pequeño muy bien situado en La Puntilla de Las Palmas, muy cerca de la playa de Las Canteras y de la zona de ambiente. Además, al ser un hotel pequeño dan un trato familiar y acogedor con multitud de detalles que facilitan las cosas y hacen más agradable la estancia. Algunos ejemplos: Nos permitieron el checking antes de las 15 h. lo que nos facilitó hacer entrada antes del mediodía y poder darnos un ansiado bañito en la playa previo a la comida. Disponen y facilitan toallas de playa, lo que supone de ahorro de espacio y peso en el equipaje del avión. Consumo gratuito de las bebidas del minibar (foto). El día de Nochevieja nos dejaron un detalle añadido en la habitación (foto), incluyendo un benjamín. La calle es tranquila y sin ruidos, a pesar de estar dos calles por detrás de la zona de ambiente. La habitación cumple perfectamente el alojamiento para una semana, que fue nuestro caso. Baño con ducha, inodoro y lavabo (eché en falta estante en la ducha para colocar nuestros geles, champús y esponjas, y también algo más de encimera en el lavabo con la misma finalidad). Un gran televisor. Armario para ropa con caja fuerte. Frigobar con armario para cafetera y algo de utillaje de cocina. Terraza con una mesa de camping y dos sillas, tendedero para los bañadores. (Quizás alguna mesa más en la habitación le vendría bien). El colchón era confortable y el aire acondicionado mantenía la estancia en una temperatura agradable. La wifi bastante potente con lecturas del SpeedTest de 33,8 y 35,6 Mbps en subidas y bajadas respectivamente. El personal se muestra muy próximo, dando información detallada de las dudas o cuestiones que van surgiendo. El hecho de que el hotel no disponga de restauración no supone mayor problema, pues allí mismo está el restaurante La Oliva, que con una gran terraza al pie de la playa atiende a un precio moderado desayunos, comidas y cenas. Hotel totalmente recomendable.…
a mi pareja y a mi nos encantó el hotel, además bien situado, un lujo de fin de semana romántico. habitación coqueta y bien equipada. limpieza y trato del personal perfecto, a pocos metros del paseo de las canteras, no se puede pedir más
La suite es preciosa. Queremos destacar la amabilidad de Lucas, desde el recibimiento, como nos explicó todo lo que necesitábamos saber y darle las gracias por ofrecernos el spa del hotel el primer día ya que el jacuzzi de nuestra habitación, pese a venir un técnico, no pudimos utilizarlo ninguno de los días lo cual fue un verdadero fastidio. Salvo ese pequeño inconveniente nos encantó todo. Como apuntes, estaría muy bien que pusieran planchas para la ropa en las habitaciones y que el recepcionista que estaba por la mañana aprenda un poco de su compañero Lucas en ser más amable con los clientes.
El hotel me gusto, esta en una calle perpendicular a la playa de las canteras. Una zona muy tranquila. Sus habiaciones espectaculares, nada mas entrar en la habitacion me encontrécon una bandada de peces, la iluminacion en azul y una enorme estrella de mar en la cabecera de la cama. Me quedé maravillada por la decoración, te hace sentir como si estuvieras en el fondo del mar. En la cocina tienes un calentador con cafe o té y en la nevera, agua, cerveza y un refresco. Lo unico que tengo que objetar es que la nevera hacia ruido y el aire acondicionado tambien.
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