La búsqueda del b&b romántico ideal en Portimao no tiene por qué ser complicada. Bienvenido a Casa Tres Palmeiras, una fantástica opción para viajeros como tú.
Como está muy cerca de conocidos puntos de referencia, como Estadio Municipal de Portimao (2,8 km) y Fortaleza de Santa Catarina (3,1 km), los huéspedes de Casa Tres Palmeiras pueden acceder con facilidad a algunas de las atracciones más conocidas de Portimao.
Casa Tres Palmeiras es un b&b romántico con televisor de pantalla plana y aire acondicionado en las habitaciones, y es fácil permanecer conectado durante la estancia, ya que ofrece wifi gratuito para los huéspedes.
Además, los huéspedes pueden disfrutar de piscina y desayuno incluido, lo que lo ha convertido en una opción popular entre los viajeros que visitan Portimao. Para los huéspedes que tengan coche, hay parking gratis disponible.
Los viajeros que quieran langosta pueden acudir a Restaurante Marisqueira Carvi. Si no, puedes dirigirte a una vinacoteca como Restaurante Casa da Tocha, RESTAURANTE Vau Wine & Diner o Alma Town - Food.Wine.Lounge Bar.
Si tienes tiempo, Marina de Portimao es un puerto deportivo al que es relativamente fácil llegar.
Casa Tres Palmeiras está deseando darte la bienvenida cuando visites Portimao.
En un sitio como Portimão, caótico y lleno de horribles edificios, se encuentra este oasis de paz. Se trata de un beb&breakfast en una localización tranquila y con unas maravillosas vistas que puedes disfrutar desde el amanecer. La atención es inmejorable, personalizada en Dolly, la dueña, que te hace sentir muy especial. Un sitio absolutamente recomendable y muy mágico. Un millón de gracias por acogernos Dolly.
Además de contar con una vista paradisíaca, Casa Tres Palmeiras invita al viajero a sentirse como en casa. La atención del personal es impecable, y su dueña, Dolly es un ejemplo, muy detallista y adorable! La casa está sobre un acantilado y la vista es inmejorable. A solo unos metros de la playa, uno puede optar por bajar al mar o disfrutar de la maravillosa piscina con agua de mar. La casa cuenta con unas pocas habitaciones lo que hace posible la privacidad y el silencio ideal para descansar. Perfecto para ir en pareja! RECOMIENDO!
Estancia matrimonio con hija de 25 años. Delicadeza en el trato y en los detalles. Fantástica ubicación. Fabulosa piscina con agua de mar. Bonito y curioso paisaje con senderos para caminar. La playa, a 3 minutos, con una longitud de 3 kilómetros, ideal para caminar y nadar. Lo mejor Miss Dolly, muy acogedora y entrañable.
A menudo, volver a un hotel puede ser decepcionante, pero, en esta ocasión, fue mejor. Nada había cambiado: la atención al detalle era increíble y todo estaba impecable. Esta joya de lugar es encantadora y espero que siga así en el futuro. Dolly, la propietaria, es una persona que piensa en todas tus necesidades. El desayuno es maravilloso y, las vistas, impresionantes. Volveremos seguro.
Probablemente no es para una familia con hijos, pero es un sitio muy romántico para parejas que quieran encontrar descanso y relax en un entorno más como lo que el Algarve debe de haber sido... imaginad alojaros en la villa portuguesa de vuestro tío o vuestra tía con unas vistas espectaculares de una de las playas más bonitas del Algarve, con un personal discreto... es un lujo realmente elegante, sin ostentación, de una forma que no se encuentra en ningún otro sitio de la costa. Un jardín agradable. Habitaciones espaciosas y bien amuebladas con ropa de cama maravillosa, como nueva. El generoso espacio del armario está bien pensado y equipado (perchas grandes y pequeñas para ropa de hombre y e mujer, cajones para objetos grandes y pequeños que permiten una buena organización, etc.). El baño es espacioso, con albornoces de alta calidad y accesorios proporcionados. La finca y las instalaciones están bien conservadas de una forma meticulosa. Las habitaciones y las zonas comunes están especialmente limpias. No hay moscas ni nada parecido alrededor de la zona de la piscina ni la finca. La zona de la piscina es fabulosa; la piscina en sí es de agua marina y no huele a productos químicos, lo que hace que sea una gozada nadar en ella. Toda la finca es muy tranquila, se oye muy poca cosa aparte del sonido del océano y los pájaros, lo que ayuda a hacer que este precioso lugar sea una experiencia de descanso. El desayuno se pide y es de buena calidad, se sirve en la terraza de la piscina, pero no está incluido en el precio de la habitación. Hay aperitivos disponibles (pagando más) durante el día y hay un minibar bien equipado. Hay tres restaurantes agradables al lado de la playa a diez minutos andando y un gran número de sitios para comer estupendos a quince minutos en coche. Al final, son los toques pequeños los que destacan esta finca de todas las demás, y provienen de la dueña, Dolly Schlingensiepen, que ayudó a supervisar la construcción de Casa Três Palmeiras hace más de cuarenta años. Esta tarea continúa para que la disfrutemos todos.…
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