Las habitaciones son muy viejas, el aire acondicionado hace un ruido horroroso. Hay que tener cuidado con los mosquitos, creemos que había una plaga cuando fuimos, como mínimo! Se va la luz a menudo, aunque si estas a media cena no te dejan sin comida. El desayuno está bueno y tienes la playa al lado. Pero mejor ir hasta playa coco, está a 7 km y es un paraíso.
Es como un hotel fantasma en una zona sin sitios donde ir, ni donde comer. El baño estava muy muy sucio, y con un olor insoportable. Queríamos quedarnos dos noches, pero decidimos irnos al día siguiente porque no había nada que hacer alli. La playa de delante del hotel estaba muy sucia. No costaría mucho que el propio hotel se encargara de mantenerla limpia. Desayuno muy escaso y camarero con pocas ganas de trabajar. Menos mal que el chico decla recepcion es muy simpatico.
Desángelado completamente, lo mínimo en la habitación con dos camas insufribles y la cena mala. Tardaron muchísimo en atendernos, menos mal que sólo estábamos de paso. Creo que éramos los únicos clientes del hotel. El camarero que había muy amable
Permítanme comenzar diciendo que me he alojado en varios hoteles de 5 diamantes en Cancún, México, así como en muchos hoteles de 3 a 4 estrellas en toda Cuba. Me registré en mi familia en el Hotel Tararaco desde el 27 de junio hasta el 7 de julio y tuve una de las mejores vacaciones, si no las mejores. La calidad humana de todo el equipo del hotel fue maravillosa. Un agradecimiento especial al gerente general, Santiago, quien el primer día nos recibió como un miembro de la familia. Muchas gracias por hacernos sentir como en casa.
Diamara en la recepción fue la mejor parte de este hotel. Y los camareros en el restaurante! El hotel estaba lleno de mosquitos, me comían vivo en nuestra habitación, las habitaciones estaban en mal estado, las sábanas estaban limpias; Sin asiento del inodoro, buena presión de agua, y agua caliente, como si fuera necesario debido al calor, en su mayoría se duchaban con agua fría. Nuestra televisión tenía un control remoto, pero nuestros amigos en otra habitación no. . . La playa estaba llena de plástico, así como el mar. . . muy triste. Pero la mejor parte de Cuba son las personas y Santa Lucía no fue la excepción. No volvería a Tararaco. Pero gracias Diamara por toda tu ayuda! !
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