Como ya se puede ver en otros comentarios en este hotel te fuerzan a Tomar sus tours y consumir en su bar, si no el personal tiene un trato pésimo y maleducado contigo. Más allá de esto, el encargado y dueño del hotel que son familia intentaron agredirme a mi y mi familia y me amenazaron el día del check out sin haberles dado razones. Tuvimos que irnos de este lugar debido al comportamiento agresivo y peligroso del personal. No vayan a este hotel es un sitio con gente peligrosa. Lanquin es un sitio bonito que visitar con buena oferta hotelera, pero no esté hotel, por su seguridad no vayan al hotel vista verde.
Llegamos el dia 14 ( para tres noches)con una reserva realizada desde hacía meses. Éramos un grupo de 11 adultos y 5 niños. Teníamos reservadas 3 habitaciones dobles y 2 de 5 camas. 1 sorpresa las hab de 5 camas no tienen puerta, asi que tenemos que ir guardando las cosas de valor en las hab dobles. La wifi solo está disponible en la zona del bar y solo desde las 9 de la mañana hasta las 11 de la noche. La piscina está ubicada en la zona más alta del hostal eso hace que las vistas sean una maravilla. Pero el último día estaba sucia. Al preguntar si podían poner los skimers a funcionar nos comentaron que la persona que se encarga ( Andres) de eso no estába y que sólo el sabía como iba. La comida es bastante variada Y muy rica además se adaptan a los cambios que pidas sin problemas. Pero como éramos 16 los platos iban saliendo de 2 en dos. Así que no pudimos comer un día todos juntos. Las duchas son con agua caliente pero no siempre había. Así que de tres días 2 me duché con fría. Y para remate cuando hice la reserva pagué dos de los tres días que íbamos a estar allí, por trasferencia bancaria en dólares. Al llegar el encargado de recepción nos comenta que podemos pagar en efectivo o bien en tarjeta con un recargo del 5%. El último día la encargada del bar al no estar Andres ( encargado de recepción) nos dicen que no podemos pagar más que en la moneda del país.les comentamos que lo tenemos en dólares y que también se había dicho que podíamos pagar en tarjeta. Al final nos dice que en tarjeta si pero que en dólares no. Nosotros insistimos que ya pagamos en dólares y que no teníamos entendido esto. En ese momento esta persona empieza a hacer un chantaje emocional. Nos dice que la jefa la echará. Que si no pagamos en quetzales ella tendrá que firmar la baja del contrato.Y nos va pillando uno a uno diciendo que eso es su ruina. Al final cuando le pagamos todo en quetzales nos devuelve 100 quetzales y se queda ella con 100 más. Después le decimos que queremos salir pronto a las 5 horas y que nos deje sacar los coches( están cerrados con una cadena y candado) y nos dice que no está permitido salir hasta las 7 de la mañana. Que su jefa no deja. Después de pelear un rato nos dice que no hay problema. A la mañana nos la encontramos durmiendo en la hamaca del bar controlando lo que hacíamos. Un vergüenza. El lugar en una maravilla y creo que con personas profesionales a cargo del hostal, sería un lugar maravilloso donde poder pasar un par de días. …
Hotel creado y levantado por una familia maya local a través del ingenio y del esfuerzo. Oscar, Rosalía y Lisbeth nos hicieron sentir como en casa. Muy buena manera de tratar a un cliente. La piscina en lo alto del hostal es una gozada, muy buenas vistas. Precios asequibles y limpieza
Vinimos con una reserva desde Flores. Al llegar nos indicaron que el precio de la reserva era bastante más elevado que la tarifa que habíamos acordado con su empresa partner y no nos quisieron dar ninguna explicación. Huímos de allí, y suerte: hay luz solo 5 horas al día (también wifi) y te venden wue tienen piscina pero hay que consumir en su bar para entrar.
Excelente ubicación e increíbles instalaciones. Lugar limpio La comida era deliciosa y una gran selección. Hay un bar y música de comida, tal vez no escuches mucho de esto en tu habitación (privada). Más de un albergue relajante que una fiesta. Fantásticas vistas y bonita piscina. El inconveniente era que el personal parecía muy agotado y el propietario trabajaba 20 horas al día, lo que la hizo cometer algunos errores de cálculo y la impacientó con nosotros. ¡Recomendaría que compruebes tu pestaña al final! Trataron de hacernos pagar la cuenta de otra persona y una gira que no hicimos con ellos. La dueña de la mujer le gritó a mi novio y no quiso hablar con él cuando le contó el error. Una noche, mi cuñado quiso ir a la cabaña Zephyr, que se encuentra a solo 5 minutos a pie de la fiesta, y la mujer le dijo que no fuera porque el camino era realmente peligroso y estaba lleno de chiflados. . . Terminó yendo sin problemas, de todos modos, y el personal del otro albergue le dijo que contaba historias como esa para evitar que sus clientes compren en otro lugar. Duchas frías. Sin recarga de agua filtrada (hay que comprar botellas). Wifi solo en un lugar público. Al final, me decepcionó mucho que un lugar tan maravilloso pudiera verse arruinado por el ánimo del personal y la actitud del propietario.…
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