Fuimos a pasar el fin de semana con toda mi familia, y fue realmente hermoso. La estancia es bellísima, la arboleda que tiene es divina, la pileta y solarium están hermosos, las habitaciones son muy cómodas y tienen bellos detalles de decoración. Nos sirvieron comida casera y la atención , cordialidad de sus dueños hacen que te sientas como en tu casa. Agustin nos llevo a una cabalgata hermosa y luego guitareamos unos temas en el fogón mientras se asaba un rico vacío al asador . Recomiendo fuerte...no se van a arrepentir.
La pasamos genial. Nos atendieron en forma personalizada. La comida exquisita y casera. Los anfitriones unos genios hasta nos hicieron guitarreras en la chimenea. Nos sentimos como en casa. El lugar muy lindo, la decoración sobria y con lindos detalles. Muy recomendable !
Vivimos una excelente experiencia con mi familia. Fue ideal para relajarnos y conectar a pleno con la naturaleza. La hospitalidad de los dueños fue inmejorable!!! Habitaciones calidas y cómodas. No podemos pedir mas!! Gracias
Florencia y Francisco hacen de la visita, una tarde en familia! La distancia es larga pero vale la pena ! La comida es espectacular! El servicio es impecable! El torneo de Polo merece la pena vivirlo! Hay muchas estancias en la Argentina y desafortunadamente demasiado comerciales! Esta verdaderamente es como estar en casa! Excelente recomendación para grupos!
Mi esposo y yo queríamos un lugar donde relajarnos antes de volver a casa. Nuestro amigo Steve nos sugirió la Estancia El Rosario: perfecta. Cuando llegamos a la Estancia nos recibieron Florencia y Francisco "Pancho" y nos trataron como "siéntanse en su casa", ¡y realmente fue así! Comidas recién hechas deliciosas, sanas, e innovadoras con una meticulosa selección de vinos de la región, y además estupenda conversación. Es evidente que Florencia y Francisco no solamente invirtieron en criar una familia grande, ¡sino que también invirtieron en ellos mismos y en su hogar! Todo se ve proyectado y reflejado en su maravillosa Estancia. Humilde pero cómoda y elegante, es un lugar fantástico para hospedarse. Su personal es eficiente, competente y muy receptivo. Las habitaciones son espaciosas, muy limpias, cómodas y con "sabor a campo". El pueblo que está a unas millas es como estar en casa. Es pequeño, amistoso y con una muy buena selección de cueros hechos a mano y artesanías únicas, además de restaurantes, tiendas, etc. ¡Es un lugar al que volveremos! Un lugar que los invitaríamos a explorar. Les deseamos lo mejor a Florencia y Pancho. ¡Salud prosperidad y abundancia! ¡Abrazos! María y Manuel de Miami.…
¿Es propietario o gestiona este establecimiento? Reclame su perfil de forma gratuita para responder a las opiniones, actualizar su perfil y mucho más.
Hacerse con el control de su perfil