Hicimos una reserva 4 días antes, nos confirmaron que estaba hecha llamándome al día siguiente, cuando llegamos al hotel nos dijeron que estaba completo y que no había habitaciones, y nos dijeron que buena suerte. Nos quedamos tirado en Grañen sin sitio al que ir. La persona que regenta las reservas (Vanesa) ni siquiera nos atendió y no nos dió solución, ni tan siquiera la opción de buscarnos algún otro sitio donde dormir. Igual es un caso aislado pero mi recomendación es pedir una prueba de reserva (ya que no la dan) por WhatsApp o e-mail al menos, y así evitar situaciones desagradables. Uno de los empleados nos ofreció una habitación en un apartamento para no quedarnos tirados (No la aceptamos ya que por suerte pudimos encontrar un habitación en un hotel de otro pueblo, pero de no ser así no nos habría quedado otra que aceptar su hospitalidad), se puede decir al menos que los trabajadores del hotel merecen la pena, muchas gracias si lees este comentario.…
Hotel familiar con servicio profesional y muy cercano. Salones de gran capacidad y dos tipos de menú: del día y de fin de semana. Abierto todos los días del año con gran disponibilidad horaria. Hoy celebran concurso de tapas de los monegros, ambas espectaculares, a destacar el taco de papada confitada a la albahaca con vinagreta de higos y helado de miel.
Tranquilo y apartado, con buena comida y agradable servicio. Una sala grande que permite reunir tooooda la familia. Menu bueno y variado. Los entrantes muy elaborados. Platos principales ricos y abundantes. Postres generosos y el menu infantil apetecible para cualquiera. Ambiente familiar y el trato cercano. Un oasis en el desierto monegrino. Recomendable para ir en familia.
Brutal! La calidad de la comida fue excelente....Buena presentación, buena decoración y muy muy bueno. Ibamos de pasada hacia olite y nos dio por parar en Grañen.... en el restaurante 4 hermanos. Si volvemos a pasar cerca nos desviaremos solo para comer en ese restaurante. El personal muy atento y agradable.
He comido en varias ocasiones y siempre muy bien, rapidez en el servicio, calidad y cantidad en la comida, muy buen precio, muy amables, limpieza, lo encuentro muy familiar, voy una o dos veces al año a Grañen y siempre voy a comer en este restaurante.
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