El Molino del Batán se encuentra a las puertas del Parque Natural del Alto Tajo, en un paraje natural único y privilegiado. Molina de Aragón, conjunto histórico-artístico, ofrece un gran legado cultural que va desde su Castillo-Alcázar o la Judería hasta las innumerables iglesias, ermitas, palacios y casonas de la misma localidad o de sus proximidades.
Molina de Aragón está bordeada por las aguas de río Gallo, que pasan lamiendo las paredes del molino, fuerza motriz, en otros tiempos, de toda la maquinaria que precisaba la industria harinera.
Lugar envidiable para un sosegado reposo en el que el canto de los pájaros, el susurro de viento y el alegre rumor de las aguas serán los únicos sonidos que rompan el silencio del lugar. Un relajado paseo por sus praderas nos permitirá contemplar en su esplendor el castillo y el alcazar; observar buitres, águilas, pequeñas rapaces, urracas, córvidos. Según la época del año podremos ver multitud de florecillas típicas del Alto Tajo, degustar la zarzamora, las endrinas, las guindas y las ciruelas silvestres.
Un lugar en el que el tiempo se mide y se valora de un modo diferente.
El senderismo, la recolección micológica (seta de cardo, níscalos, boletus, colmenillas, e incluso la trufa), la caza, la pesca, la espeleología, el vuelo libre, el descenso por aguas bravas, la escalada, las rutas a caballo, las rutas en quad y casi cualquier otra actividad que se imagine puede realizase en entornos muy próximos.
El alojamiento ocupa una gran finca en la que se encuentra el molino, una casa solariega y una amplia extensión de terreno dedicado a pradera, al cultivo de frutales y a huerta estando todos los espacios abiertos a los visitantes. El proyecto supuso la rehabilitación integral de uno de los mayores y más famosos molinos del siglo XIX que existieron a la vera del Río Gallo y que fue explotado durante varios años como batán. durante la rehabilitación se encontraron diversas pilas y utensilios que así lo indican.
El edificio principal, el Molino, es un hermoso edificio del siglo XIX construido con sillería de arenisca roja en las esquinas y puerta principal siendo sus muros de mampostería y cal. Por él pasó la mayor parte del trigo que se cosechaba en el Señoría de Molina. Como curiosidad diremos que sus habitantes llevaban el trigo a moler y se llevaban el salvado de la molienda para alimentar a cerdos y caballerías mientras que la harina se distribuía directamente de la fábrica a los panaderos de los pueblos ajustando cuentas para San Miguel.
El agua, canalizada, pasaba por el interior del edificio para mover una turbina y generar la electricidad que precisaba la fábrica y la casa solariega.
La casa solariega tiene el mismo tipo de construcción siendo la vivienda del amo de la propiedad.
La huerta se encuentra rodeada por el Río Gallo y por el riachuelo que servía para dar energía al molino. Un muro con altas rejas, algunas de las cuales aún se conservan, le daba seguridad y la separaba del río. En esta zona, los visitantes podrán disfrutar de praderas, exposición de aves (pavos reales, codornices, perdices, gallinas enanas y periquitos), barbacoas, árboles frutales y la huerta.
El recuerdo del pasado se aprecia en multitud de elementos decorativos y en un interesante museo etnológico que contiene parte de la maquinaria del molino, diversos utensilios que se usaban en las tareas agrarias de la zona y otros elementos como llaves, cerraduras y pernios.
El hotel es un molino harinero del siglo XIX rehabilitado en apartamentos rurales con identidad histórica totalmente equipados: chimeneas francesas, hidromasaje y salones sociales. Ofrece además:
Celebración de bodas, eventos....
Parking gratuito
Museo de Antigüedades y Etnológico (aperos de labranza, forja, etc.)
Cafetería
Restaurante
Zona recreativa y de ocio
Barbacoas (a disposición de nuestros clientes en verano)
Actividades y entorno
Senderismo, bicicleta de montaña, piragüismo, rutas a caballo, escalada, barranquismo, trekking, visitas guiadas, etc.
Ciudad monumental con calificación de Conjunto Histórico-Artístico, Alcázar, monasterio.
Parque Natural del Alto Tajo, Sabinares
Práctica cinegética y pesca fluvial
Verdaderamente es un lugar con encanto. Las habitaciones, la vista del Castillo, la decoración y el personal son parte del éxito. El trato familiar de los propietarios hizo que me sintiera como en casa, rodeada de un ambiente agradable y placentero. Aunque era diciembre, el calor de la chimenea nos abrigaba y la charla amena nos invitaba a quedarnos allí todo el día. Hay un gran aparcamiento para coches y el acceso es directo. La comida abundante y el desayuno para mi gusto perfecto y variado. Desde luego, es un lugar ideal para celebrar eventos, bodas y celebraciones porque hay mucho espacio exterior para la temporada de verano. El pueblo está cerca y se puede ir andando.
he de volver en cuanto lo necesite y esté en la zona. Muy bien atendido y asesorado por los dos hermanos. La habitación completa para poder pasar una noche acogedora y si fuera necesario para mas dias. Me dieron un desayuno completo, no faltaba nada. Me parecieron buena gente y profesionales conocedores del sector y de la zona Sin duda, volveré.
Hospedería de ambiente rural, junto al río, atendido por los hermanos Pedro y Jesús. De agradable trato, es un placer conversar con ambos, personas afables y serviciales. Se respira un ambiente sano, de frío seco, vigorizante, a cinco minutos del centro de Molina de Aragon. Apartamento confortable, amueblado con gusto, chimenea, calefacción y cuarto de baño con bañera y amenities. Disponen de una enorme carpa junto al río, rodeada de jardines, destinada a celebraciones y eventos.
Una estancia encantadora en un alojamiento con esencia rural, ubicado en un antiguo molino. Es la tercera vez que visitamos Molina de Aragón y desde la primera vez que nos alojamos, hemos repetido. Ubicado en las afueras a tan solo unos minutos de la localidad, sus habitaciones y apartamentos rústicos son cálidos, acogedores y con unas vistas impresionantes si vuestra habitación se encuentra enfocada al castillo. El propietario es amable y atento, pura simpatía, y dispuesto a atenderos ante cualquier problema e incluso orientaros en la zona. El desayuno excelente y completo, con productos de calidad y artesanales, el pan tostado y bizcocho artesanales deliciosos ¡Una maravilla!
nos reunimos el pasado 6 de julio 30 exalumnos del colegio santo tomas de aquino cursos 1961-1966.los entrante-comida-servicio fueron de 10.los hermanos jesus y pedro super amables.todos nos fuimos muy contentos
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