San Diego encarna el estilo de vida relajado de California, en el que destacan su paseo marítimo, su comunidad de surfistas y su excepcional comida mexicana. Respira el aire fresco del mar en el parque natural Sunset Cliffs Natural Park y, después, cómete un taco de pescado fresco en uno de los restaurantes de mariscos del barrio de La Jolla. Además, te quedarás ensimismado al admirar las aeronaves de la Armada que se exponen en el portaviones USS Midway convertido en museo. Asiste el domingo a un concierto gratuito en el Spreckels Organ Pavilion para disfrutar de un día perfecto de relax después de salir de bares la noche antes en el palpitante barrio Gaslamp Quarter.

Tijuana, que recientemente se libró de su reputación de libertina, experimentó un renacimiento total. Aunque los animados bares que sirven tequila siguen existiendo en cantidad, el Centro Cultural Tijuana, el Estadio Caliente y el mercado El Popo también ofrecen una saludable dosis de cultura mexicana.

Conocida como el hogar “del lugar más feliz en la Tierra”, en Anaheim no solo encontrarás emocionantes parques temáticos. Si tienes apetito, no te olvides de visitar el distrito Anaheim Packing District y el paseo Center Street Promenade, donde descubrirás restaurantes eclécticos y premiadas cervecerías artesanales. Descubre las últimas exhibiciones del Muzeo Museum and Cultural Center. Disfruta de música en vivo en la nueva House of Blues, ahora en Anaheim GardenWalk.

Para algunos, la visita al Queen Mary, atracado aquí desde su jubilación en 1967, evoca olas de nostalgia por los días de esplendor del enorme trasatlántico, con sus opulentos camarotes, su decoración art deco de los años 30 y sus cubiertas de madera de teca. Otros, sobre todo los más jóvenes, disfrutan con las escalofriantes historias sobre barcos embrujados que se cuentan durante la nocturna visita guiada fantasma. Sin embargo, una visita al museo y hotel flotante resulta obligatoria para todo aquel que vaya a Long Beach. Long Beach, que en su momento fue un lugar poco atractivo para visitar, se ha convertido hoy en día en un selecto destino turístico, con muchas atracciones a orillas del mar, como un nuevo y moderno acuario con una estupenda exposición de tiburones, dos museos de arte magníficos, preciosas tiendas, campos de golf públicos, el Gran Premio de automóviles que se celebra cada año en abril y muchas actividades recreativas a lo largo de sus doce kilómetros de playa. Lleve a sus hijos al complejo de entretenimiento frente al mar, que cuenta con atracciones y actuaciones en vivo, o a las demostraciones de agricultores en el Rancho Los Alamitos. ¿Es usted un romántico? Si es así, navegue en crucero por los canales de Nápoles (en efecto, la Isla de Nápoles, en Long Beach) en una auténtica góndola veneciana. Una cosa es segura: en esta tranquila y agradable ciudad conseguirá liberar tensiones y estrés.

Treinta y cinco millas al noroeste de Los Ángeles se encuentra Ontario, también conocida como la puerta al Sur de California. La ciudad tiene su propio aeropuerto internacional y está cerca de las atracciones de Los Ángeles, Palm Springs, Disneylandia y otros parques temáticos, así como de los lugares turísticos de montaña Lago Arrowhead y Big Bear. Mientras están en Ontario, los visitantes pueden comprar antigüedades, encontrar gangas en el centro comercial Ontario Mills, visitar la Graber Olive House, divertirse en el Parque de ocio Scandia y visitar el Museo de Historia y Arte.