Desde que entras hasta que sales casi cuatro horas después puro y gozoso espectáculo. Original bienvenida empezando el agape en bodega con los tres primeros aperitivos, continuando con los siguientes tres frente a la cocina abierta, atendidos directamente por los cocineros, para continuar el maravilloso...desfilar de platos en mesa, con unas vistas espectaculares de Peña Montañesa, con un servicio de mesa profesionalmente informal, atentos y con el tempo bien aprendido. La plástica belleza de sus elaboraciones, junto a la calidad, así como la medida cantidad hacen que la experiencia sea tremendamente satisfactoria. El prepostre volvemos a bajar a bodega para catar los buenísimos quesos del Sobrarbe, para subir de nuevo y maravillarnos con la "elaboración" del postre cual lienzo directamente sobre nuestra mesa, previamente adaptada para ello. Esteticamente una preciosidad, lo mas original, a la vez que lo mas flojo para el paladar, quizás fuera el único pero (a mi no me dijo nada). Buenisimo el sumiller con sus vinos y explicaciones, cogimos la opción maridaje y fué un acierto. En definitiva y como digo en el titular, lo mejor de nuestras vacaciones. Valió la pena prolongar un día mas nuestra estancia en Ainsa para comer en Callizo.Más