Este es un restaurante que personalmente le tengo mucho cariño por los años que llevamos yendo. Con un ambiente familiar muy agradable, un local al puro estilo de montaña excelente y muy hermoso y una comida muy buena, sobre todo las carnes a la brasa...y los postres. Por eso lo que escribo va a ser siempre en tono constructivo y desde el respeto. Nos ha sucedido las últimas dos veces, de que al pedir, se equivocan con uno de los segundos y después la persona ''que le tocó'' se tiene que esperar hasta que los demás prácticamente han terminado. Este es un error de servicio, que aún ser perdonable, se agradecería que por parte del restaurante hubiera algún detalle final (como cafés gratis, como disculpa o algo similar. No pasa nada y daría mucha calidad). Pero para mí, y las personas con las que he ido, ya sean familia o amigos, lo peor siempre es uno de los camareros, el que normalmente sirve los cafés. -Da un servicio malo-. Y vuelvo a decir que este es un comentario desde el respeto, por qué soy consciente de que se trata de una situación especial. Pero creo que precisamente por este motivo mucha gente no se atreve a decirlo. Pero seamos claros, es muy borde y en más de una ocasión te arranca el plato de la mesa casi dándote en la cara. Sinceramente, no lo tendría sirviendo al cliente, seguro que hay mil tareas más adecuadas. Le resta mucho al restaurante. Y no lo digo con ninguna maldad, que quede claro, lo digo como cliente habitual.Más