Comer en la marisquería Las Palmeras siempre es un acierto. Cuentan con pescados y mariscos fresquísimos y de gran calidad, cocinados de la mejor manera para conseguir un sabor exquisito, acompañado de los mejores vinos o con unas cervezas bien frías, a un precio asequible...y con un servicio atento, rápido y simpático. Todo ello sin olvidar las espectaculares vistas al mar.Más