Malas formas de algunos camareros, escasa atención al cliente, precios muy caros (una maceta de tinto de verano 5,20 euros). Están sobrepasados y nos invitaron a marcharnos tras un incidente con un camarero que intentó salir de la barra para agredir a un cliente y...otro que empujó a otro cliente. Tienen tanta gente que el trato y el servicio es denigrante hacia las personas que tratan de comer, eso sí, después de muchos minutos de espera para una mesa. En definitiva, no vuelvo más y no se lo recomiendo, algunos trabajadores (camareros) son de pelea rápida. Escasa psicología y encima sin razón. Puntuación cero. Hay que ser más humilde. Muchas gracias por no preguntar qué fue lo que ocurrió. Cree el ladrón que todos son de su condición. Entiendo perfectamente que defienda su negocio, pero no con mentiras y a costa de nosotros. Quiero aclarar varios puntos a su escrito de contestación y réplica que no son ciertos: 1. Ese día, al llegar a su restaurante, nos dirigimos al responsable de la terraza (metre o encargado) para pedirle, si era posible, una mesa en la zona de afuera. Nos dijo que esperáramos sobre 20-30 minutos, puesto que no había mucha lista de espera para esa zona y en poco tiempo se despejaría. Y eso fue lo que hicimos dos de los adultos, esperar fuera de la zona de la terraza hasta que nos dieran la mesa. 2. Eran las 15 h y por ser la fecha que era, tenía medio salón vacío, por lo que no entiendo el problema que pudiera surgir un cambio de mesa en esas condiciones. 3. Dos adultos con dos niños pequeños esperaban en la barra, tomándose un tinto de verano, uno de ellos. No comenta nada del incidente que protagonizó su grosero camarero y cómo agredió con insultos a uno de los adultos en presencia de los niños, sin olvidarnos del responsable de la terraza que llegó como un energúmeno, sin saber qué había pasado, a empujar a un cliente que iba a abonar la consumición. Ese es el verdadero conflicto y el por qué se suscitó todo, y usted obvia ese problema dedicándose a mentir sobre la petición de la mesa por nuestra parte de manera irrespetuosa. Entiendo que muchos de los que allí trabajan son familia y no quieren comprometerse. Usted tiene gente no cualificada para servir en un negocio de esa categoría, personas jóvenes sin tacto y psicología, sobre todo dos, y menos mal que nosotros somos gente pacífica, si dan con otras personas con otro carácter conflictivo, que las hay, el lío hubiera sido muy gordo. 4. Hemos reflejado un hecho que ocurrió para que otras personas sepan cómo tratan a sus clientes. 5. Ah, por cierto, las reseñas críticas hacia su negocio no son de nuestro entorno. Está usted muy equivocado. A nosotros no nos hace falta que nadie de nuestro entorno, como usted comenta, critique lo que hacen mal, que son muchas cosas. Quédese con eso. Hemos expresado el bochorno que vivimos en su establecimiento ese domingo de marzo. Y otra cosa, usted nos invitó a no volver más. Cuide el negocio, cuide a lo clientes que son los que le dan de comer y ofrezca un curso de trato, tacto y psicología a sus empleados. Le irá mejor de lo que le va, que le va muy bien, porque todo no es malo en su establecimiento. Y, por favor, no mienta. Un fuerte abrazo. La vida da muchas vueltas.Más