Fuimos a cenar. En la terraza con un ambiente agradable. Buen servicio y atentos en las sugerencias. Las sardinas muy buenas en tamaño y calidad. El resto también bien

Buen pescado y amable el servicio, pero el local es viejuno y feo .No entiendo como aún existen este tipo de locales tan esperpéntico.

Ya hemos visitado este restaurante en varias ocasiones durante todo el verano y la comida esta buena, pero el trato de algunos camareros y/o encargados deja mucho que desear. Con la idea clara de lo que queríamos, pedimos ensalada, pastel de cabracho, arroz, sardinas y...bonito; de entrada nos desaconseja las sardinas, (en tono paternalista), porque dice que son de Valencia, (todo el restaurante comiendo sardinas) y que no pidamos bonito porque las rodajas eran pequeñas y nos aconseja pedir machote; nos damos un momento para pensar y vamos a preguntar al encargado de la parrilla y nos dice que las sardinas están muy ricas...pedimos ambas cosas y nos las sirve haciendo la señal de la cruz en plan "sálvese quien pueda"; a los diez minutos nos dice que no queda bonito y que pidamos machote (ya no sabe como colocarnos el pez); pedimos otros platos . El remate viene cuando públicamente trata muy rudamente a un camarero, lo tilda de torpe, de romper la vajilla y de atender mal y que le pidamos todo a el...tenedores y copas volaron en nuestra presencia de las propias manos de este encargado...conclusión: nos arruino la comida y nos lo pensaremos antes de volver de nuevo.Más

Muy rica la comida con mucha variedad Te atienden súper bien son súper majos contigo Relaccion calidad precio Pedimos unas cuantas cosas y nos encantó todo

Raciones grandes por el precio de pequeñas, además todo buenísimo. El pescado, la carne parecen de máster chef.

Comida buena,pedimos unas almejas las cuales eran bastante grandes y después una mariscada. De postre pedimos tarta de queso y torrija,las dos muy buenas. El camarero nos preguntó si queríamos chupito después del café y le dijimos que si, cual fue nuestra sorpresa, que al...traer la cuenta nos cobraron 2,50€ por cada chupito ( en vasito pequeño,vamos una uña). Le dijimos que pensábamos que a eso invitaba la casa y nos dio largas,no sabía que decir. Mal esos detalles, nunca nos había pasado que te ofrezcan un chupito y te le cobrenMás

Cuando vas a un restaurante que tiene a gala ofrecer gastronomía marinera, avalado con la vitola de ubicarse en el centro del barrio pesquero santanderino, tratar el producto con tanta torpeza es imperdonable. Menos las sardinas que son de 10, ves como las asan al...carbón, servidas in situ, calidad suprema…lo que siempre supieron hacer y ahora también. Lo demás es otra historia, de pena. Las rabas, es lo más emblemático de Santander, y se trata de calamar-magano o peludín, pero si es de otro molusco, pota etc. empezamos mal, y si encima van fritas y envueltas con aros de cebolla, es de pecado mortal…pero lo que indigna al comensal menos exigente es pedir un pescado (en nuestro caso lubina) y eso sí, viene con un carro para emplatar como mandan los cánones, pero solo es parafernalia. ¿Resulta que en la bandeja trae la lubina cortada en filetes con aspecto de estar fritos, incluso con capita de harina? Iluso de nosotros que pensábamos que como en otros lugares similares de puerto pesquero la lubina o el besugo lo hacen a la parrilla…pregunto, y me dice que está al horno y pasada por la plancha. Al horno cualquier pescado queda muchísimo más apetecible y jugoso, y a la plancha por supuesto también. Se notaba a legua que había sido cortada en filetes antes de asarla o hacer nada, y por eso estaba seca y sin sabor, y para colmo, igual que la cebolla en las rabas (para hacer bulto) la sirven con desbordante cantidad de patatas, pero que son cocinadas aparte y luego las ponen encima del pescado, no la patata que se pone acompañando al pescado en el horno que luego sabe a gloria, éstas saben a patatada y punto. En fin, cualquier aficionado a los fogones en la cocina de su casa, se remanga y le da mil vueltas a lo que aquí se hace con una lubina. El precio y demás aspectos de como son las instalaciones, no entro porque sólo quiero referirme a los platos, aunque para hacerse una idea comparativa doy el dato, 50 € kilo de lubina y 21€ la botella de vino de Protos roble, en otros restaurantes suelo pagar 18€, el doble de lo que vale en tienda al público, es lo más habitual. Por supuesto, otros clientes se llevan parecida impresión, aunque no se molesten en escribirlo en TripAdvisor. No es fiable a favor o en contra el que escribe una sola opinión, hay que ver los comentarios emitidos, en mi caso más de 80 que son todos menos éste y otros cuatro, para agradecer el buen hacer de los restaurantes visitados. Mala imagen para la gastronomía santanderina.Más