Fuimos por la curiosidad de descurbrir nuevos sabores, en este caso de la cocina sueca.
La sorpresa fue muy grata, empezando por la simpatía de la propietaria, siguiendo por el lugar, muy acogedor, y terminando por la comida, muy sabrosa, con productos de buena calidad...y que permiten salir de lo habitual y experimentar nuevos sabores.
En nuestro caso, al ser dos, queríamos probar los platos más tradicionales de la comida sueca, y nos dejamos aconsejar por la propietaria, lo que acabó siendo todo un acierto. Pedimos los siguientes platos para compartir:
- Gazpacho sueco, pepino, manzana, eneldo y chili (no picante); 3.5€
- Salmón ahumado con madera de olmo, aguacate, wakame asian style y rábano picante; 9.9€
- Reno ahumado en pan tunnbröd, cebolla con cerveza, nata agria, arándanos rojos y queso västerbotten; 13.6€
- Albóndigas, puré de patatas, arándanos rojos, salsa de nata y pepino en escabeche; 15€
- Postre: quiche crumbel de ruibarbo con helado de vainilla; 7.5€
Todos los platos fueron para compartir entre 2 personas. Acabamos llenos y la cuenta final salió a 60€ (30€/persona).
Aunque todos los platos nos encantaron, tanto el reno como las albóndigas (plato más típico sueco) deben probarse, al igual que el postre, ya que según nos comentó la propietaria no es fácil poder comprar este tipo de verdura en España.
En conclusión, estamos seguros que volveremos a Pappa Sven para acabar de probar otros platos típicos de la gastronomía sueca. Sin duda es un restaurante muy recomedable para los que estan abiertos a probar nuevos sabores.Más