Me recomendaron el sitio por ser sin gluten ni lactosa, y sinceramente, poder comer lo que quieres sin tener que andar mirando los alérgenos, es un lujo.
El local es pequeñito pero acogedor además de estar decorado super bonito, y los camareros corteses.
La carta...tenía un millón de cosas que nos hubiera gustado probar, pero nos decantamos por las gyozas (ricas) y luego cogimos katsukare y yakisoba (ambos espectaculares. El rebozado del escalope, perfecto y los fideos riquísimos). Cuando acabamos y pensamos que no podía mejorar el asunto, pedimos un brownie de matcha. No. Dejéis. De. Pedir. Los postres.
Cuando estás acostumbrado a comer sin gluten, te acostumbras a que los pasteles se desmiguen, se desintegren, no tengan el mismo sabor que las "cosas normales". Este es la mejor versión de brownie que he probado en todos mis largos años de dieta sin gluten. Se me escapaban las lágrimas.
Volveré segurísimo.
PS: una única pega, es el precio. Algunos platos eran caros por la cantidad que se presentaba, pero yo estoy acostumbrada a gastar de más en productos sin gluten y ni me di cuenta, a mi pareja le chocó más.Más