Un precio aceptable para la cantidad y calidad, se come bien, buen seservicio y la comida muy bien también En mi opinión recomiendo los de langostino de tempura

Buenísimos todos los rolls y tempuras. No habían gyozas, así que tendremos que volver para degustarlas. Repetiremos seguro porque relación calidad precio insuperable. Decían algunos comentarios que eran lentos pero estaba todo lleno y en menos de 1 hora acabamos.

Calidad de la comida justita. Servicio correcto y rápido, aunque había poca gente cuando fuimos. Salimos a unos 18 euros por cabeza. El precio es razonable. El local no es ninguna maravilla. No me entusiasmó. No volvería

Comida buena, pero un desastre de servicio. Se olvidaron de los segundos platos y al reclamarlo, se volvieron a olvidar una vez más. Tardarón en total unos 30 minutos en servirlo. Y no recibimos ni un "disculpad las molestias". Para no volver.

Fatal! Es la 4 vez que pido, y vivo en Andorra. Y la comida esta buena! Pero os aseguro que pidiéndolo a domicilio... vais a perder todo gusto.. llevo esperando desde las 8:50 y son las 10:30 y vivo a 2,1km... es LAMENTABLE He pedido...un cooulant... encima ULTIMA VEZ estoy harto!Más

Pedimos X cosas y la mitad no llegaron, pedimos una siguiente ronda y mas de lo mismo, incluso tubo que venir su compañero a consultarnos de nuevo la segunda ronda... Pedimos un coulant de xocolate y nos lo sirvieron frio... Conclusión: no volvemos

... y lo lamento de veras porque había cenado allí en varias ocasiones en la anterior ubicación y me gustaba. Ha pasado de ser un sitio sencillo con buena comida a haberlo tachado de mi lista de restaurantes "a repetir". Estuve cenando con la familia...y aquello fue un cúmulo de disparates y torpezas. Tomar la comanda era un problema para el servicio que debía leer (y anotar) palabra por palabra la descripción de los platos en la carta. A pesar de todas estas precauciones, por tres veces intentaron dejar en nuestra mesa un plato que no habíamos pedido: nuestra elección fue foie amb sake roll y tempura roll y lo que llegaba a nuestra mesa no era ni lo uno ni lo otro sino otros rolls con alga nori por la parte exterior. Además tenía buen recuerdo de la comida de ese sitio y aquellos rolls se deshacían con mirarlos. Asimismo, pedimos la cantidad que consideramos oportuna según las indicaciones de la carta: donde se podía pedir unidades, luego era lotes de cinco (nigiri) y donde ponía cinco luego eran diez (foie amb sake roll), cosa que confirma mi temor de que el personal desconoce las características de cada plato ni tiene recursos para excusarse amablemente con un "permítanme que lo consulte" (nadie nace sabiendo todo). Fue especialmente tenso el momento en que trataban de convencerme de que yo había pedido eso: "yo sé qué he pedido; lo que ignoro es lo que se ha apuntado en la comanda que ha llegado a cocina". Afortunadamente uno de los platos de fideos que pedimos nunca llegó porque si no, habríamos salido rodando de allí. Después de tanto malestar. optamos por pedir la cuenta y anular lo que quedaba pendiente. Debo agradecer al propietario del local que, consciente de la situación, tratara de invitarnos a cenar, oferta que decliné porque yo pago lo que he pedido (en función de la descripción de la carta) y me he comido, que esta persona tiene facturas con proveedores y sueldos que asumir. De verdad que me da mucha pena ver un sitio agradable caer en el abismo. Aunque sería bonito pensar que cualquiera tiene un día malo, me cuesta volver a comprobarlo.Más