Ud., mismo lo ha dicho, "Yo no coincido con la SUERTE de este Sr.".
No se trata de suerte, de la mayor o menor fortuna, ni se trata de un juego de azar, cuando se tiene al alcance tan excelente materia prima, se trata de... Más
Ud., mismo lo ha dicho, "Yo no coincido con la SUERTE de este Sr.".
No se trata de suerte, de la mayor o menor fortuna, ni se trata de un juego de azar, cuando se tiene al alcance tan excelente materia prima, se trata de buen hacer, y ese ha sido el fallo de este establecimiento, que las carnes ya estaban medio elaboradas a falta de darles un último calentón y a la mesa, y después por ese trozo de carne recalentada te cobran 23 euros.
Eso no es tener mala suerte, eso es confiar en que todo estará acorde a la calidad que propagan en su carta y no esperas mediocridad a altos precios, que la relación calidad precio, no es la adecuada para ese bodrio de comida.