La carne está increíblemente tierna y sabrosa, sobre todo el Chateaubriand acompañado de papas gratinadas. Entrantes: papas arrugadas con mojo, empanada de ternera, pan de ajo con queso y tabla de quesos con membrillo, todo buenísimo. De postre, brownie con helado de vainilla, también bueno....Servicio excelente y pianista estupenda ofreciendo música en directo, incluso dejó que una de mis acompañantes tocara en el piano. Muy buena velada, repetiría sin dudar.Más