Fuimos hace un par de semanas a este japo recomendados por unas amigas que ya habían estado. Habíamos reservado como nos dijeron (y menos mal) y teníamos la mesa en la terraza, con un ambiente súper acogedor.
Para empezar el sitio es precioso y desde...que llegamos nos atendieron genial.
La carta es muy variada y dan ganas de probarlo todo. Nosotros pedimos el tartar de salmón y mango que estaba riquísimo, dos makis distintos y unos niguiris variados incluyendo el de anguila, que no la habíamos probado nunca y nos encantó...cada bocado mejor que el anterior, espectacular.
Se nota que es un sitio en el que apuestan por la calidad del producto, todo está cuidado al más mínimo detalle. Precios más que razonables.
Sin duda alguna uno más en nuestra lista de favoritos, volveremos.Más