Fuimos a Katz por la famosa escena de la película. Al llegar puede resultar algo desconcertante: te dan un ticket y no se explica mucho... Bien, hay que ponerse a la cola de lo que uno va a pedir. Lo más probable es que se...pida el sándwich de Pastrami (riquísimo y muy abundante, nosotros pedimos uno para los dos) y, en otra cola, las bebidas y la guarnición (en nuestro caso, una ración de French fried, también para compartir). Muy buen ambiente, un sitio acogedor y una comida estupenda. Recomendable 100%Más