He ido en varias ocasiones a este restaurante, y en esta ocasión...
Según llegamos había cola, teníamos delante unas 5/6 personas y esperamos como ha de ser, cuando nos va a tocar nosotras llegan unos ingleses se ponen a hablar con el camarero (creo que...es el encargado) y para dentro...para que hay una cola?? Salió y ya le dijimos que teníamos reserva y para dentro, nos sentaron en una mesa justo detrás del hombre que canta en directo, MAL, teníamos que hablar bastante alto para poder hablar entre nosotras, pedimos la cena, croquetas, costillas y solomillo (estaba rico, pero no tan rico como en otras ocasiones) y...a mitad de la cena que vemos en la pared y en el suelo...cucarachas...en fin...han bajado el nivel mucho, así que de momento no volveremos.Más