Fuimos haciendo el camino De Santiago, llegamos a comer a las 16h y cerraban cocina a las 16.30h, nos dieron mesa muy amablemente.
La comida, el trato, limpieza, las vistas… sin duda, un lugar excepcional para volver, tanto, que comimos y reservamos para cenar.
Camareros...muy amables que te recomiendan para que la experiencia sea aún más plena.
Estábamos en una mesa al lado de la cocina donde se ve completa, limpieza y cuidado al nivel máximo.
Buenísimo todo lo que probamos!!! En especial las carnes ya que son especialistas en ello.
Si vuelvo por allí, sin duda volveré!!Más