Todos tenemos una estrella en nuestro camino.
Desde pequeña, "Iraider" siguió los pasos de esa luz que le guiaba.
Primero su padre en la cocina de un petrolero. Su abuela y madre que eran los faros de aquel puerto donde siempre arriban las esperanzas de...progreso y la alianza del trabajo y la ilusión, que dos emprendedoras consiguieron en el pequeño y antiguo Regi que se abrió en Urduliz.
Iraider y su hermana Maitane lograron que como comensal me quedara prendida, de los múltiples y variados platos que aderezaban nuestras comidas. Marchaba con el deseo de retornar lo antes posible.
En abril del 2019 se abrió lo que considero uno de los dos mejores restaurantes de Bizkaia, (para mí el primero) y he comido en muchos de todas las categorías, hasta de una a tres estrellas Michelín, pero este es el mejor en el difícil equilibrio "calidad - precio".
Nada más llegar te inunda la deliciosa cascada y sus plantas en el muro, que confieren al ambiente una cautivadora y plácida tranquilidad tan ansiada de encontrar.
Al entrar al local, la foto de "Iraider" matiza una figura regia pero cálida que infunde confianza y cercanía. La barra a la izquierda y enfrente un comedor amplio con grandes ventanales y plantas estratégicamente salpicadas, te adentran en el local.
Yo suelo pedir el menú degustación con el vino aparte, pero el bufé es amplio bien sea a la carta o con los diferentes menús, y no es que te decepcione ninguno, sino que la variedad y exquisitez del producto y la presentación de los mismos, te hacen sentir que estás en un lugar no dónde quisieras volver pronto, sino donde no te quisieras marchar.
Buen hacer. Buen producto. Amabilidad del conjunto en el servicio, logran una comunión que en poquísimos lugares de la restauración se haya conseguido.
Una hermana de estas dos personas que dirigen la cocina fue la mejor ciclista del país "Joane Somarriba" y mi opinión es que, en una familia luchadora, estas mujeres emprendedoras van a la cabeza de ese buque que es el difícil arte de la restauración. De raza le viene al galgo.
La única pega por decir algo es que se encuentra un poco desplazado de Bilbao, pero le suple con creces el mérito de su cocina y el maravilloso entorno, por lo que yo les pediría que " por favor" siempre tengan una pequeña mesa reservada para mí, aunque sea en el rinconcito.
Porque sin ser nada de esta familia, siento la importancia y !El orgullo de llamarse REGI!.Más