Hemos estado mi pareja y yo de fin de semana romántico y la verdad es que todo empezó muy bien. El hotel tiene mucho encanto, es muy bonito. La piscina no la vimos ocupada en ningún momento, un poco sucia y en zona de sombras no acompañaba el baño. La habitación correcta, con un pequeño balcón. Nosotros sólo hemos estado una noche y nuestro propósito era desconectar y descansar. Pues bien, en las habitaciones se escucha todo, y todo es todo. La gente que pasa por el pasillo...la gente que está en el restaurante...en las zonas comunes.... En fin. Por la noche, mi pareja y yo nos pusimos un ratito en la terraza,a hablar, y nuestros vecinos de habitación empezaron a aporrearnos la pared. Total, que nos fuimos a dormir cuando eran las 11 de un sábado. El desayuno normal, no es abundante, es correcto.Lo peor de todo fue al irnos. Teníamos el coche aparcado a la derecha del hotel, en una rambla, y cuál fue nuestra sorpresa al ver el mercado semanal. Pegatina de la grúa y sorpresa, más de 150 la broma. El guardia urbano nos advirtió que pusiéramos una crítica pq el hotel debió avisarnos,ya que no es la primera vez que pasa y al no tener recepción 24 horas no pueden avisar. Así que andaros con ojo y que no os pase lo mismo. Nosotros no volveremos.